Hombre mayor de 31 años: el consumo de cocaína repunta un 8% en Sevilla

El consumo de cocaína aumentó un 8% en 2023 entre las personas atendidas por Proyecto Hombre en Sevilla, según el informe presentado este martes por la organización. Los problemas de adicción a esta droga son más acuciantes entre hombres, que representan el 57% del total, y mayores de 31 años (el 71%).

Este mismo estudio pone el foco también en la drogodependencia en un colectivo muy vulnerable: los menores. En concreto, el 40% de los consumidores de cannabis como droga principal tiene menos de 18 años. Y no solo les afectan los estupefacientes: las adicciones sin sustancia crecieron un 15% en 2023 con respecto al año anterior en este sector de la sociedad.

Cerca de la mitad de la población adolescente atendida "presenta un diagnóstico dual: conducta adictiva y trastorno mental", apuntan desde Proyecto Hombre Sevilla. Unas consecuencias que sufren mucho más ellos que ellas: ocho de cada diez usuarios del programa Proyecto Joven, que abarca desde los 14 a los 21 años de edad, son hombres.

Culpa, estigmas y falta de apoyo: las barreras de las mujeres

"Es un hecho que continuamos constatando: el colectivo de mujeres tiene unas barreras claras y evidentes que vencer antes de llegar a nuestro tratamiento", advierten desde esta asociación. "El sentimiento de culpa, el estigma social y la frecuente falta de apoyo familiar, son variables principales que influyen a la hora de reconocer un problema relacionado con las adicciones y pedir ayuda".

Pese a los recelos iniciales, la delegación sevillana de Proyecto Hombre prestó sus servicios a un 4% más de mujeres durante 2023 comparado con el año anterior. Esta tendencia "va gradualmente al alza y consolida la atención a este sector poblacional".

Asimismo, en el informe se destaca que "las mujeres que usan sustancias potencialmente adictivas parecen seguir un proceso del incremento del consumo más rápido que los hombres".

Crece los solicitantes entre las personas sin hogar

La falta de un hogar donde vivir es una de las circunstancias que empuja, según datos de esta organización, a solicitar una plaza en las viviendas de apoyo al tratamiento (VAT) de las que dispone Proyecto Hombre. Durante el pasado año, se incrementó un 18% las peticiones de este servicio entre las personas pertenecientes a este colectivo vulnerable.

Tal como apuntan desde la asociación, "a esta población se asocia una situación de deterioro físico y cognitivo altos, por lo que es preciso dar una respuesta rápida desde las distintas áreas: médica, asistencial y terapéutica".