Ley Segunda Oportunidad

Los Morancos, "contentísimos": consiguen cancelar 6 millones en deudas a un centenar de familias

Primer año de vida de Libres de Deuda, el despacho creado por los humoristas Jorge y César Cadaval para facilitar a personas con problemas económicos acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad y empezar de nuevo

César y Jorge Cadaval, Los Morancos

César y Jorge Cadaval, Los Morancos / Marc Casanovas

Autónomos arruinados, jubilados que han pagado las deudas de sus hijos, gente que ha perdido su casa y, pese a ello, ha seguido pagando al banco... Son algunos de los clientes atendidos por Libres de Deuda, el despacho creado hace ahora poco más de un año por Jorge y César Cadaval, Los Morancos, uno de los dúos humorísticos más queridos de España. Su fin: facilitar a quien lo necesite -y cumpla los requisitos que exige la normativa- acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad y empezar de nuevo. El balance es más que optimista: en este tiempo suman seis millones de euros cancelados a un centenar de familias que arrastraban enormes deudas. "Están contentísimos", señala a El Periódico de España Juan Manuel Jiménez López de Lemus, director jurídico del despacho.

En 2023, este diario desvelaba que los hermanos Cadaval se habían embarcado en una nueva empresa muy alejada de su proyección pública como artistas. Los Cadaval contaban entonces que eran los socios y creadores de un proyecto en el que, a través de un equipo de abogados que ellos mismos habían seleccionado, buscaban un nuevo comienzo para quienes estaban ahogados por las deudas a través de la Ley de la Segunda Oportunidad.

Quiebra o bancarrota

Una normativa que fue aprobada en España el 25 de julio de 2015 y entró en vigor el 26 de julio del mismo año y que se ha implementado en varios países para proporcionar a las personas físicas (particulares) y autónomos una vía para acabar con su insolvencia económica y sobreendeudamiento. Busca otorgar la posibilidad de comenzar de nuevo y reestructurar las deudas, evitando así la declaración de quiebra o bancarrota.

 "Solo con que una de esas personas sea capaz de solucionar esos problemas, el proyecto habrá tenido sentido", confesaban a este diario. Más de un año después, los artistas andaluces están enormente satisfechos, cuenta Jiménez López de Lemus. "Aparte de que la aceptación ha sido muy buena por la gente, ellos venden confianza. El tema con la segunda oportunidad es que, como es algo tan poco creíble, en el mercado hay mucho pirata que se aprovechan de algunas situaciones. Nosotros somos superescrupulosos", afirma.

"Como todo, es un nicho de mercado que es importante. Hay mucha gente que se dedica a esto sin saber. Yo llevo 35 años en el derecho concursal. Sé de concursal y, en mi despacho, también, pero aquí se meten abogados que a lo mejor llevan oficios de tráfico. Con esto hay que tener cuidado, ser muy prudentes. No nos podemos permitir el lujo de fallar porque al final fallan ellos (Los Morancos). Si lo hacemos algún día es porque nos equivocamos o porque hay clientes que ni saben las sanciones -de la Seguridad Social, por ejemplo, cita el abogado- que acumulan".

Familias empobrecidas

"Entre nuestros clientes hay de todo", explica Jiménez López de Lemus. "En España hay muchísima gente que no llega, con poco dinero. Una de las causas de no exoneración (es decir, la no cancelación de la deuda) es el endeudamiento irresponsable. Lo que no puedes es levantarte de madrugada y que haya alguien que te de mil euros tocando un botón. Ese crédito irresponsable es lo que provoca esto nuestro al final. La mayoría de nuestras llamadas son de madrugada, de gente que ni duermeAdemás de quitar la deuda, nosotros les devolvemos la vida porque, además, duermen", añade.

Lo que no puedes es levantarte de madrugada y que haya alguien que te de mil euros tocando un botón

Juan Manuel Jiménez López de Lemus

El abogado insiste: lo que "vende" el despacho de Los Morancos, con sede en Sevilla, es "confianza. No estamos aquí para engañar a nadie". Y, aclara, "tampoco se trata de que esto sea una ONG. Hay gente que piensa que quien quita la deuda son Jorge y César. Se lo digo muchas veces a ellos. 'No digáis eso, que la gente viene preguntando si podemos pagarle nosotros los dientes'. Esto tiene su coste, como cualquier otro despacho, pero la gente tiene la seguridad de que nadie les engaña y, al final del proceso, van a conseguir cancelar su deuda", asegura.

La transparencia

Porque, repite, lo más importante es la transparencia que tiene la firma: "Tenemos una plataforma en la que los clientes ven día a día cómo va su expediente". Los plazos de la tramitación son muy cortos, depende del juzgado, dice. "Estamos consiguiendo una media de ocho meses". A día de hoy, Libres de Deuda lleva cerca de los seis millones de euros exonerados (unos cien casos resueltos) y casi once millones tramitados, lo que se traduce en 300 expedientes. Casos de toda España, aclara el letrado.

Las familias están abonando al despacho "100 o 125 euros al mes. Gente que estaban pagando más de 1.000 euros todos los meses en distintos préstamos"

En la web del despacho, figuran las tarifas que deben pagar los clientes por llevarles su caso. "Están abonando 100 o 125 euros al mes. Gente que estaban pagando más de 1.000 euros todos los meses en distintos préstamos. Vuelven a vivir", abunda. Precisa que reciben "muchisimas llamadas" pero no todo el mundo, por los requisitos que exige la ley, puede acogerse a la segunda oportunidad.

"Como los toreros"

En la firma, explica Jiménez, hay unas doce personas dedicadas al tema. De ellos, nueve son abogados. Pero detrás, siempre muy pendientes, Los Morancos. "Están muy contentos. Muy satisfechos. Ayudan a tantos, al final, la gente se lo devuelve. Hacen reír, pero, además, tienen esto", apunta. ¿Y cómo pueden compaginarlo con su faceta artística?. "Son como los toreros, tienen tres o cuatro vidas", señala con ironía.

Desde el primer momento, César y Jorge Cadaval dejaron claro que no eran solo la imagen de esta aventura, como puede suceder en otros casos en los que conocidos bufetes contratan a personajes famosos para temas similares. Que el proyecto era suyo y estarían muy encima de él. "Son los que mandan. A nuestros clientes les sorprende mucho cuando les llaman por teléfono ellos mismos para comunicarles que les han exonerado (la deuda). Hay muchas anécdotas. Hay quien se pone a llorar... de todo", explica el letrado.

Se remite a una historia de hace apenas unos días. Los hermanos Cadaval viajaban a Córdoba a recoger un premio. "Entró el caso de un señor de Santander. Normalmente, lo que hago es decir: 'Oye, que tenemos una exoneración. Vamos a llamarlo'. Entonces, lo llamaron: 'Mira, que soy César Cadaval, que te llamo para darte una buena noticia: ¡ya se ha acabado todo, ya no tienes deuda!. No veas el de Santander, que al principio no se lo creía, cómo se puso de contento", zanja.