Cómo trabaja Ecoembes para mejorar el reciclaje

La organización lleva más de 25 años gestionando el reciclaje de los envases de plásticos, latas y briks, y papel y cartón y, a partir de 2025, también de envases comerciales

Planta de selección

Bego Contreras

Según el estudio realizado por Kantar para Ecoembes, 8 de cada 10 hogares aseguran que separan sus envases. Pero para poder hacerlo, hay una cadena de trabajo detrás que hace que todo el engranaje funcione, desde que los contenedores estén cerca del hogar de cada ciudadano o que los camiones de recogida de basuras los vacíen cuando estén llenos hasta que las empresas utilicen envases que tengan un alto grado de reciclabilidad o que los ciudadanos estemos concienciados sobre la importancia de reciclar los envases y lo hagamos.

Más de 19.000 empresas gestionan sus envases a través de Ecoembes 

Apoyo para las empresas

Las empresas que ponen envases en el mercado tienen que hacerse cargo de que haya una correcta gestión de los mismos. Así, a día de hoy, más de 19.000 empresas gestionan sus envases a través de Ecoembes, desde donde les ayudan en todo lo que afecta a su actividad con respecto al reciclaje. Además, a partir de 2025, también gestionará los envases comerciales. Ecoembes trabaja en cuatro áreas para dar servicios a las compañías. En primer lugar, ofrece asesoramiento, desde mandar documentación a asesoramientos más avanzados o servicios de consultoría. Rebeca Mella, gerente de Desarrollo de Valor al Cliente de Ecoembes, explica que “nuestro lema es la flexibilidad, nos adaptamos al tipo de compañía y al tipo de necesidad que tengan”. En segundo lugar, la entidad acompaña a las empresas en materia de ecodiseño. Rebeca revela que “tenemos guías donde damos las claves para ecodiseñar a disposición de nuestros clientes, pero tenemos una herramienta que nos ayuda a saber el porcentaje de reciclabilidad de cada uno de los envases. Hay clientes que nos piden que les hagamos un análisis consultivo y les demos recomendaciones”.

La tercera área en el que trabaja Ecoembes es en ayudar a formar a los trabajadores de esas 19.000 empresas en materia de economía circular. Para ello, sus clientes tienen acceso a una plataforma de e-learning. Por último, trabajan con las empreas para ayudar a sensibilizar a los ciudadanos en materia de comunicación para que los consumidores sepan a qué contenedor tirar los envases concretos de esa compañía. “Tenemos el conocimiento de toda la cadena de valor para ponerla al servicio de nuestros clientes”, concluye Rebeca.

Los residuos recogidos se trasladan a una de las 97 plantas de selección

Recogida de residuos

Una vez que los ciudadanos depositan sus envases en el contenedor amarillo o azul, los ayuntamientos tienen que encargarse de establecer la frecuencia de recogida y organizar la flota de camiones. Javier López, gerente de Oficina Técnica de Ecoembes, nos cuenta que, desde la organización medioambiental, “realizamos estudios de optimización de cómo han de ser las ubicaciones para los contenedores y cuál ha de ser la frecuencia”. Se realiza un estudio de la zona, si son edificios verticales o no, y de cuánto están dispuestos a recorrer los ciudadanos desde su domicilio al contenedor, que por lo que estiman, no superará los 200 metros. Con toda la información, presentan un planteamiento para la ubicación de los contenedores a los distintos ayuntamientos y recomiendan la frecuencia de recogida, “hay que ir a recoger los contenedores cuando estén llenos, pero sin estar desbordados”, señala Javier López. Hay que tener en cuenta también, que muchos de los envases que se consumen, en ocasiones se hace fuera de los hogares.

Para hacer posible su reciclaje, Ecoembes ha firmado diferentes convenios con gestores privados, concretamente con 81 con los que llega a más de 17.000 emplazamientos diferentes, tales como parques de ocio, estadios de fútbol, universidades y hospitales, entre otros. Alberto Caldeiro, gerente de recogidas Fuera del Hogar de Ecoembes, argumenta que “estas recogidas garantizan que todo el envase sea gestionado de manera análoga a cómo se hacen en los contenedores azules y amarillos de nuestros domicilios”. Una vez que los residuos son recogidos, se trasladan a una de las 97 plantas de selección distribuidas por toda España, donde son separados por tipo de material mediante diferentes procesos y máquinas (separador balístico, ópticos, magnético…) y enviados a empresas recicladoras homologadas. En estas plantas, se obtienen siete fracciones a los que se les da una nueva vida: el plástico PET, vuelve a convertirse en botellas o textil, el plástico PEAD se usa para hacer nuevas botellas o tuberías, el plástico mezcla se transforma en mobiliario, el plástico film se usa para hacer bolsas, los briks pasan a ser cajas de cartón y papel para libros, el acero y el aluminio, se usan para hacer llantas de bicicletas, ollas y sartenes. Javier López, nos explica, que “nos alimentamos de lo que hacen las empresas, conocemos las mejores prácticas en cada territorio y compartimos esa mejor tecnología con todos las demás. Procuramos dar a los ayuntamientos el máximo asesoramiento para que sean lo más eficiente que sea posible”.  

Campañas de sensibilización

Para que el ciclo del reciclaje tenga resultados, el primer paso comienza en los hogares de los ciudadanos. Para ello, y junto con las administraciones, Ecoembes trabaja en campañas de sensibilización específicas en cada zona en función de la información que se traslada desde otras áreas. En lo que va de 2024, se han llevado a cabo más de 265 campañas. “Un residuo que se deposita en el contenedor adecuado, entra en un proceso circular en el que se va a convertir en otro producto que vuelve a entrar de nuevo en el ciclo”, nos explica Susana Revuelta, gerente de Marketing de Ecoembes, a lo que añade que “se trata, en definitiva, de alcanzar la circularidad plena de los envases”. Dentro de los convenios que Ecoembes firma con la administración pública, hay una partida dedicada a la sensibilización ciudadana.

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Las campañas tienen que ser un recordatorio y tener un componente didáctico, “intentamos buscar la razón que les podemos dar para que el ciudadano que recicla, lo siga haciendo y el que todavía no lo hace, se anime a participar”. En este sentido, Susana nos recuerda que “nuestro plan estratégico trabaja en la idea de un futuro sin residuos, puede parecer una utopía, pero queremos transmitir que, con la economía circular, esto es posible”.