La cúpula de los bomberos de Valencia, cuestionada por su actuación en la DANA

Alrededor de 150 bomberos de la plantilla municipal de València, casi la mitad del total, se reunieron en asamblea para expresar su malestar por la gestión que los mandos del cuerpo han hecho de esta dana y en otros servicios relevantes como el incendio de Campanar. El acto se celebró el miércoles por la noche en el Parque Central de la Avenida de la Plata a propuesta de los propios bomberos y con la organización del sindicato mayoritario SPPLB; y en el mismo se pidió la destitución del jefe actual y la convocatoria de movilizaciones. Según fuentes sindicales, "los propios bomberos querían expresar sus opiniones a nivel profesional y su enorme malestar latente por la gestión que desde la jefatura se ha realizado tanto de la dana como del resto de servicios de relevancia acaecidos durante este año 2024 en la ciudad de València". El ayuntamiento, por su parte, ha asegurado que el mismo día 29 se reforzaron los servicios y se salvó, junto con la Policía Local, a más de 300 personas. Y todo ello pese a que la ciudad funcionaba con normalidad y había que atender las muchas incidencias que se produjeron ese día.

Las críticas de los agentes

"La actual jefatura de Bomberos Valencia, con su máximo responsable al mando, ha demostrado una preocupante incapacidad para liderar y gestionar de manera efectiva un cuerpo esencial para la seguridad de los ciudadanos. Su gestión ha dado lugar a un ejército de oficiales que distan mucho de la profesionalidad y responsabilidad necesarias para ejercer las funciones de liderazgo que sus puestos requieren", asegura el SPPLB en un comunicado.

Según relata, el deterioro en la calidad y preparación de los mandos quedó en evidencia durante las oposiciones para acceder al puesto de oficial de bomberos. Tal fue el despropósito en el proceso selectivo, dicen, que "incluso el presidente del tribunal expresó su preocupación y puso en entredicho la capacidad de muchos de los que hoy forman parte de la cúpula de mando". Esta advertencia quedó registrada de forma oficial en el acta correspondiente tras la publicación de las notas del último ejercicio teórico de conocimientos, aseguran. En ella, "el presidente del tribunal manifestó su sorpresa ante el bajo nivel demostrado por los aspirantes en esta prueba, especialmente considerando que, en ejercicios previos y bajo sospecha de posibles filtraciones, muchos de ellos habían obtenido calificaciones relativamente altas".

"Incluso el presidente del tribunal expresó su preocupación y puso en entredicho la capacidad de muchos de los que hoy forman parte de la cúpula de mando"

Precedentes

Con estos precedentes el sindicato no se sorprende de la "desorganización y la falta de liderazgo operativo" en incidentes tan importantes como el incendio forestal de El Saler, "donde la ausencia de una coordinación adecuada llevó a los equipos operativos de bomberos a pasar horas prácticamente abandonados sin comer ni beber"; o el incendio de Campanar, donde "la mala gestión, la ausencia de decisiones claras y una interpretación errónea de la situación derivaron en un desastre que marcó profundamente a todos los bomberos presentes". "Este incidente no solo dejó en evidencia la falta de preparación de la jefatura, sino que también puso en riesgo tanto a los profesionales como a la ciudadanía", aseguran.

De todas formas, "si algún hecho ha sacado a la luz de manera definitiva las graves deficiencias de la jefatura de Bomberos Valencia, ha sido la gestión de la DANA ocurrida el 29 de octubre en la ciudad de Valencia y sus alrededores, considerada la mayor catástrofe vivida en España este año".

Falta de respuesta

Según el sindicato, "se falló en los tiempos de respuesta, con una gestión operativa que estuvo muy lejos de estar a la altura de la emergencia". "No se activó al personal fuera de guardia para reforzar el servicio en el momento crítico, ni se movilizó al Grupo Especialista de Buceo ni a la Unidad Canina, a pesar de que ambos han intervenido en catástrofes internacionales como las de Turquía o Siria. Estos grupos no fueron activados en la ciudad de Valencia hasta 96 horas después del inicio de la emergencia, lo que resulta incomprensible en un escenario de esta magnitud", precisan.

Y por si fuera poco, "durante la noche del 29, la gran mayoría del personal que estaba de guardia permaneció en sus respectivos parques de bomberos sin ser desplegado a las zonas afectadas. Además, se comunicó a la mayoría de los voluntarios que no era necesaria su presencia, bajo el argumento de que la situación estaba controlada. Solo pasados tres días se destinó un equipo de 8 bomberos y 3 mandos para acudir a las poblaciones más afectadas, un despliegue a todas luces insuficiente y tardío que evidenció una vez más la falta de planificación, de previsión y de competencia".

Este "cúmulo de errores y decisiones cuestionables" no solo ha minado la confianza en la jefatura de los propios bomberos, sino que "ha puesto en peligro a la ciudadanía y a los propios profesionales que configuran el Cuerpo de Bomberos". Por todo ello, en la asamblea realizada, "el colectivo de bomberos ha pedido al SPPLB la realización de acciones y movilizaciones para dar solución a esta situación ya insostenible en Bomberos Valencia con la exigencia del relevo en la jefatura del cuerpo".

Respuesta oficial

Estas acusaciones del SPPLB, sindicato mayoritario de cuerpo, no ha tardado en tener respuesta oficial. Según fuemtes municipales, "Bomberos Valencia ha movilizado más de 100 efectivos cada día desde que comenzó la dana" y la misma noche del 29 de octubre "desde las 20.00 aproximadamente se envían dotaciones al recibir los primeros avisos de inundaciones y se dimensionan los efectivos y se activan las unidades según se observa la dimensión del temporal y sus consecuencias en las pedanías de Valencia".

Estas fuentes recuerdan que "el 90% de la ciudad funcionaba con normalidad y no se vio afectada por las inundaciones, por lo que es necesario mantener los equipos mínimos para dar respuesta a cualquier incidencia que pueda producirse en la ciudad, como así sucedió con dos incendios industriales la misma noche del día 29 de octubre, o los más de 60 servicios que se atendieron en la ciudad por caídas de ramas y cascotes debido al temporal de viento".

En cuanto a la plantilla operativa en los parques "se ha reforzado en un 62% para poder atender la emergencia de la dana". "Se han movilizado todas las unidades. De hecho la primera noche Bomberos Valencia, con embarcaciones y en colaboración con Policía Local, rescató de bajos y garajes a más de 300 personas. Sobre las 21 horas el PMA estaba instalado y a día de hoy sigue en la Torre y la unidad de buceo y canina sigue colaborando en las tareas de búsqueda de víctimas en la Albufera, o en labores de apuntalamiento en edificios de Sedavi y Benetuser". 

Las fuentes recuerdan, finalmente, que "el ámbito competencial del cuerpo municipal de bomberos es municipal y ante la situación de emergencia 2 hay que coordinar el envío de recursos con el CECOPI, como así se hizo actuando en Paiporta, Sedaví, Benetuser, Alfafar, Masanasa, Picanya en tareas de achiques, limpieza de garajes, etc". 

Críticas al jefe del Cuerpo Provincial de Bomberos

El inspector jefe José Miguel Basset, cabeza del Cuerpo Provincial de Bomberos de Valencia también ha recibido críticas por la gestión de la dana.

Fuentes conocedoras del día a día en el puente de mando apuntan que por momentos se le vio ‘desbordado’ en las primeras jornadas, sin tomar decisiones ejecutivas ni valorar la necesidad de recursos que el Estado le estaba brindando, pero cuya petición correspondía a la Generalitat.

Son los días en los que los soldados se pedían de 500 en 500. “Faltó iniciativa para pedir más recursos. Y luego tenía que dirigirlos, no darles autonomía o autogestión; tienes que decidir qué quieres y qué necesitas. Muchas reuniones están siendo un descontrol, mucha gente opinando y poca decisión, y Mazón tampoco ayuda porque no toma las riendas”, señalaban.