Violencia de género

Investigan como crimen machista la muerte de la mujer que cayó al mar en Pontevedra con el coche que conducía su pareja

La víctima, de 41 años y de origen marroquí, apareció flotando junto al coche que él precipitó al agua frente a un muelle en la localidad de Moaña

El acusado, de 47 años, que ya estuvo en prisión por violencia machista, permanecía hospitalizado por hipotermia y bajo custodia

Investigan la muerte de una mujer que cayó al mar en Pontevedra con el coche que conducía un hombre

Julio Santos Álvarez

Cristina González

Fadoua Akkar, marroquí de 41 años y vecina de Pontevedra, murió este sábado en la localidad de Moaña. Su cuerpo apareció flotando en el mar tras un accidente de coche, rodeado de "sospechosas" circunstancias, tal y como confirmó en la misma mañana el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, que llevó a la Guardia Civil a investigar si se trataba de un caso de crimen machistaA las 21:00 horas, la Guardia Civil confirmaba este origen machista y A.C.T., de 47 años, pasaba a quedar detenido como presunto autor de homicidio en el ámbito de la violencia de género.

El accidente ocurrió en torno a las cinco de la madrugada cuando el coche en el que iba la mujer, un Volkswagen Passat de color gris, conducido por el vecino de Moaña se precipitó al mar desde el paseo de Domaio, a la altura del club de jubilados, en una zona en donde el agua no alcanza mucha altura y cuando la marea estaba casi alta.

El hombre, con antecedentes por violencia de género, salvó la vida y fue rescatado por los servicios de emergencias con síntomas de hipotermia e ingresado en un hospital de Vigo, en donde ayer estaba custodiado por la Guardia Civil, a la espera de los resultados de la investigación, pendiente también de la autopsia a la mujer. Fadoua Akkar presentaba un golpe en la cara, del que ayer no se confirmó si tuvo que ver con el accidente de coche o no. El cadáver, trasladado al muelle, fue levantado por orden judicial sobre las 10:00 horas y trasladado al Anatómico Forense de Pontevedra.

Las huellas de las ruedas del coche por la hierba en el paseo peatonal de Domaio.

Las huellas de las ruedas del coche por la hierba en el paseo peatonal de Domaio. / Santos Álvarez

En el momento de los hechos, algunos bateeiros trabajaban en el muelle en la descarga de mejillón y señalaron que el coche llegó hasta el muelle, pero el conductor dio un trompo y se dirigió después acelerando por la zona peatonal del paseo, atravesando la hierba, en donde ayer eran visibles las huellas de las ruedas, hacia el club de jubilados desde donde se precipitó a la ría. El propio subdelegado confirmaba también ayer que “hay testigos que dicen que el vehículo aceleró notablemente y se adentró en una zona peatonal antes de caer a la ría”, sin dejar de llamar a la prudencia porque la investigación seguía abierta, aunque habló de circunstancias sospechosas y que “la mujer perdió la vida al precipitarse al agua un coche conducido por un hombre”. Insistía en que están abiertas todas las posibilidades.

Una vecina que se encontraba cerca del club de jubilados fue quien alertó del suceso a la Policía Local de Moaña conforme veía luces de un vehículo que había podido caer al mar. La Policía lo trasladó al 112 que movilizó las unidades de emergencia, incluidos los bomberos, que ayudaron a rescatar al conductor que estaba sobre el techo del coche, semihundido y pedía auxilio. Prácticamente llegaron todos los servicios de emergencia al mismo tiempo. El coche se encontraba a unos 8-10 metros de la escollera del paseo. La mujer que iba en el coche no aparecía y su cuerpo fue hallado un tiempo después, flotando, durante las maniobras de rescate del vehículo por parte de uno de los barcos bateeiros.

El conductor fue trasladado al hospital Povisa de Vigo donde ingresó por hipotermia. Estaba inconsciente y custodiado por agentes de la Guardia Civil. Según confirmó el subdelegado del Gobierno A. C.T. figura en la base de datos del VioGén, el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género, por unos hechos violentos ocurridos en el año 2012 y por los que ingresó en prisión tras ser condenado por la Audiencia Provincial de Pontevedra. Este moañés tuvo una orden de alejamiento vigente hasta el 2020 con respecto a la mujer víctima de aquel episodio. Las citadas fuentes aseguran que intentó “asfixiarla”.

“Desde luego hay algunos indicios preocupantes”, incidió Losada sobre el desenlace de la investigación. “Pero es necesario esperar a que concluyan las diligencias judiciales y policiales”, zanjó. De confirmarse el origen machista del suceso y siempre a la espera de los resultados de la investigación, dice Losada, se rompería una racha de 15 meses en la provincia sin casos de crímenes por violencia de género. De la mujer fallecida añade que la mujer fallecida no estaba registrada como víctima en el sistema VioGén y por tanto no había medida restrictiva o de protección en torno a ella.

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