Investigación
El profesor de Valencia detenido por abusos a seis menores queda en libertad
El Juzgado de Instrucción número cuatro de Mislata no ha adoptado medidas cautelares al no existir riesgo de fuga y no hallar material pedófilo en los registros
El juez suplente del Juzgado de Instrucción número cuatro de Mislata ha acordado la libertad sin medidas cautelares del profesor de religión detenido por presuntas agresiones sexuales a menores en un colegio de un municipio de l'Horta (Valencia) que este periódico no revela para preservar el anonimato de las víctimas y evitar la revictimización de los menores. La libertad provisional ha sido acordada de conformidad con el criterio del Ministerio Fiscal, según fuentes del TSJCV, al no hallar indicios de criminalidad tras las diligencias practicadas, entre ellas la exploración en el Instituto de Medicina Legal de València de tres de los siete menores.
El arrestado, que ha abandonado las dependencias judiciales en un vehículo policial tras ser sacado por una ventana para intentar evitar a los medios gráficos -que ya habían informado que no iban a mostrar el rostro del detenido para preservar precisamente el anonimato de los menores - se ha mostrado colaborador tanto con la policía como en el juzgado. Durante su declaración ha negado cualquier contacto sexual con los menores, tanto besos como caricias, y ha tratado de dar explicación a las manifestaciones que constan en las denuncias.
Precisamente, en la decisión del juez para dejarlo en libertad sin ningún tipo de medida cautelar ha tenido en cuenta el resultado de la exploración urgente a tres de los niños realizada por parte de cuatro especialistas del Instituto de Medicina Legal de Valencia, de la que no se desprende "ningún indicio de criminalidad" ni se ha apreciado indicios de ninguna situación relacionada con ningún abuso ni con ninguno de los hechos investigados que han sido denunciados por los padres, consistentes en tocamientos, besos y fotografías íntimas, aclara el juez en su auto de libertad.
Sin elementos periféricos que confirmen los hechos denunciados
También ha tenido en consideración las manifestaciones del entorno laboral y familiar del detenido y el resultado inicial de los registros domiciliarios y el examen de sus dispositivos electrónicos y su teléfono móvil, que no han deparado tampoco en este momento procesal ningún indicio incriminatorio en su contra, indican fuentes del TSJCV.
La detención del docente, que ha adelantado en exclusiva Levante-EMV, se produjo ayer cuando agentes de la UFAM de una comisaría de Policía Nacional, tras diversas investigaciones, procedieron al arresto del profesor de Educación Infantil.
La causa está abierta por un delito de agresión sexual a menores, de cuatro años, tras recibir la policía la denuncia de los familiares de al menos siete alumnos de este profesor de 47 años, que imparte Religión en el colegio de l'Horta donde se habrían producido presuntamente los abusos denunciados.
En los dispositivos electrónicos intervenidos por la policía, tras los registros en dos domicilios del presunto pederasta y en el propio colegio, no se ha hallado material pedófilo ni indicios que apoyen el testimonio de los denunciantes. No obstante, las investigaciones siguen abiertas ya que los menores relatan hechos muy similares a sus padres, que sí incriminan a su profesor. Para descartar que estén contaminados por las propias preguntas de sus progenitores será clave el testimonio de los pequeños, mediante cámara Gesell, y así esclarecer si la actitud del docente con los mismos es constitutiva de delito o no.
Los hechos se destaparon el pasado 4 de octubre cuando la primera madre acudió al colegio muy exaltada para denunciar que el profesor de religión estaba abusando de su hijo de cuatro años. Como ha explicado este periódico, la mujer relató que la tarde anterior le llamó la atención un juego de su hijo en el que, utilizando unos muñecos de superhéroes, representó como estos se besaban, nombrando a dos de sus compañeros de clase y al profesor de religión. Cuando le preguntó a su hijo, el pequeño le dijo que el citado profesor, al que se refirió con su nombre, les «pinchaba» con la barba o bigote (de algunos días sin afeitar) al darles besos.
La dirección del centro escolar, tras tener conocimiento de estos hechos, informó a la inspectora educativa y pusieron en marcha el protocolo PREVI (Plan de prevención de la violencia y de promoción de la convivencia) de la Generalitat Valenciana.
El instructor ha decretado la libertad y ha decidido remitir las actuaciones al Decanato de los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Mislata para que se reparta y asigne a uno de sus órganos judiciales por tratarse de hechos de fecha indeterminada.
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