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Sede de la Cabalgata, en las antiguas cocheras de Tussam. / M.P.
Vicente Granados, Francisco Salas y Rafael González Serna. Ellos son los encargados de encarnar a Melchor, Gaspar y Baltasar, respectivamente, para repartir ilusión por las calles de Sevilla en un día que no se antoja fácil por las previsiones meteorológicas que vaticinan lluvias importantes.
Pero nada puede parar a sus majestades, que esperan que hoy lluevan muchos caramelos y regalos. Granados, Salas y Serna tienen en sus manos la enorme tarea y responsabilidad de hacer que los Reyes Magos derrochen la fantasía y la magia que les caracterizan para que la sonrisa reine en el rostro de los niños que abarrotarán las calles de la ciudad esta tarde.
Sevilla hoy se convertirá en un hervidero de emociones y recuerdos. Sus majestades lo saben bien, porque, además, tendrán que afrontar una segunda cabalgata mucho más íntima y recogida que les llevará a visitar el Hospital Virgen Macarena. Y ahí habrán de obrar la magia que necesitan los niños que allí se encuentran. Una magia solo al alcance de los Reyes Magos.