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Los dos hijos toreros de Manuel Benítez ‘El Cordobés’. / El Correo
Los dos hijos toreros de Manuel Benítez ‘El Cordobés’ se verán las caras en un ruedo. Será el próximo 11 de marzo en la plaza de toros de Morón en una corrida mixta que completa el rejoneador Diego Ventura y en la que se lidiarán reses de Las Monjas. El evento, que ha despertado una inusitada expectación mediática, ha sido presentado esta mañana en los salones del Gran Meliá Colón. La noticia ha cobrado una relevancia añadida por la reciente sentencia que reconocía la paternidad del mítico diestro de los años 60 sobre Manuel Díaz, que hará el paseíllo junto a Julio Benítez compartiendo el mismo apodo: El Cordobés.
El acto, que ha sido conducido por el periodista Enrique Romero, ha contado con la presencia de ambos diestros que torearán por primera vez juntos gracias a los oficios del empresario cordobés Antonio Sanz además de José María Díaz, hermano y hombre de confianza de Manuel, y Tomás Campuzano, apoderado de Julio Benítez.
Manuel Díaz fue el encargado de abrir el turno de palabra agradeciendo a su hermano y compañero el haberle “permitido torear con él” esa corrida de toros. “Siempre ha hablado bien de mí, eso me consta”, señaló Díaz calificando el evento como “la corrida más importante” de toda su vida. “Espero que este principio de amistad algún día llegue a algo más y logremos ser normales”, añadió Manuel. “Venimos del mismo sitio y vamos para el mismo lado”, afirmó el torero, que nunca dudó en torear con su hermano Julio al que calificó de “valiente” por dar este paso. “Se trata de un paso muy importante que trasciende del toreo”, recalcó Díaz que afirmó sentirse “orgulloso de aprovechar una oportunidad que nos brinda la vida y el toreo”.
“Queremos aprovechar el tiempo que no hemos tenido pero de momento nuestro tiempo es el toro” advirtió el veterano diestro de Arganda del Rey. “De momento lo que nos une es un apodo pero espero que el día de mañana ese apodo también pueda ser un cariño, un roce o una amistad”, precisó el matador.
Julio Benítez también tuvo palabras de elogio y satisfacción. “Estoy supercontento de haber dado este paso con Manuel”, afirmó el joven diestro que reconoció sentirse “en una especie de nebulosa”. “Ahora me viene todo un poco grande pero estoy muy ilusionado; le tengo mucho respeto por lo que ha conseguido en el toro, espero que sea una gran tarde y el tiempo dirá si esto –ojalá- llega a mucho más”, se sinceró. “Estoy viviendo un sueño”, añadió Manuel Díaz. “Ese sueño era anunciarme con El Cordobés y ahora me voy a anunciar con El Cordobés”, completó el mayor de los hermanos en alusión a su padre.
Pero había una pregunta obligada. ¿Qué pensaba el primer Cordobés de este encuentro? “A mí no me ha dicho nada”, bromeó Manuel que aún no ha logrado un acercamiento a su padre a pesar del reconocimiento logrado en los juzgados. “Sé que está de acuerdo con esto y está contento”, le explicó Julio sin poder desvelar si el padre estaría ese día en la plaza de Morón aunque reconoció que le hacía especial “ilusión”. “La ilusión que tenemos es de toreros y cuando salga el toro no sabrá quiénes somos”, advirtió Díaz reconociendo que “la vida da muchas vueltas y a veces te sorprende y te regala cosas”.
“Este es un tema nuestro; es nuestra decisión y hemos decidido dar el paso adelante los dos”, advirtió el más veterano, mostrando su satisfacción por “no haber perdido la oportunidad de conocernos en esta vida”, añadió Manuel Díaz reconociendo que “por ley de vida” estaba en el último tramo de su vida profesional. “En el toro siempre tiene que haber un Cordobés y Julio es la persona más adecuada para llevar ese estandarte cuando yo no pueda; ese apodo te supera cuando lo pones en un cartel”, finalizó el penúltimo Cordobés.