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Toreros, empresarios y organizadores en el acto de presentación del evento. Foto: Toromedia
El festival a beneficio de las obras sociales y asistenciales de la Hermandad del Rocío de Triana y la Fundación Alalá pondrá el punto y final a la temporada taurina 2023 en la plaza de la Maestranza reuniendo en el mismo cartel al rejoneador Fermín Bohórquez -que reaparece exclusivamente para la ocasión- además de los matadores de toros Morante de la Puebla, José María Manzanares, Alejandro Talavante, Pablo Aguado, Alfonso Cadaval y el novillero Mariscal Ruiz. Todos ellos actuarán desinteresadamente. El acontecimiento contará con las reses, donadas por sus respectivos criadores, de las ganaderías de Fermín Bohórquez (que lidiará a pie y a caballo), Alcurrucén, El Pilar (lidiará también dos ejemplares), Garcigrande y Santiago Domecq.
Los pormenores de la organización y la nómina de actuantes han sido presentados a mediodía de este lunes en un acto celebrado en el Salón de los Carteles del coso sevillano que ha contado con la presencia de los gestores de la empresa Pagés, Ramón Valencia Pastor y Ramón Valencia Canorea; el hermano mayor de la corporación de la calle Evangelista, Federico Flores y el presidente de la Fundación Alalá, José María Pacheco. Tampoco han faltado los auténticos catalizadores de la organización del festejo, el diestro Miguel Báez ‘Litri’ y el rejoneador y ganadero Fermín Bohórquez que ido más allá al asumir la tripe faceta de organizador, ganadero donante y, definitivamente, como actuante ya que reaparecerá de forma puntual para abrir el cartel.
De la misma forma hay que resaltar la presencia, entre otras personalidades, del delegado del gobierno de la Junta, Ricardo Sánchez; del teniente de alcalde delegado de Fiestas Mayores, Manuel Alés, acompañado de su director de área, Javier Hernández, además de la directora general de Alalá, Blanca Parejo.
Un cartel con atractivos
Ramón Valencia Pastor recordó la implicación de la empresa Pagés con este tipo de acontecimientos benéficos –hasta 140 se contabilizan en los archivos de la calle Adriano- y confirmó lo que ya se sabía: el festival se celebrará el día 15 de octubre, que cae en domingo, por “los compromisos contraídos con anterioridad por los actuantes”. La clave era la presencia rutilante de Morante de la Puebla, que el día 12 está anunciado en Madrid.
El hermano mayor del Rocío de Triana, Federico Flores, se deshizo en agradecimientos a todos los actores que, de una u otra forma han contribuido al buen fin del cartel presentado poniendo un especial acento en la propia empresa Pagés y la figura del humorista César Cadaval al que calificó como “verdadero ideólogo del evento”. Flores también destacó los vínculos con la Fundación Alalá cuyo presidente, José María Pacheco, reincidió en los agradecimientos y subrayó los numerosos vínculos que unen la entidad al mundo del toro. “La Fundación está llena de toreros y de ganaderos; Alalá significa alegría en caló y yo sólo quiero que el día 15 sea un día de alegría para Sevilla y todos nosotros”, añadió Pacheco recordando la implicación personal de Litri y Fermín Bohórquez –añadiendo al equipo a su hermano Iván, que no pudo estar presente- y los fines de una asociación que trabaja especialmente en el mundo de la educación. Flores, por su parte, desveló que el evento contaría con algunas actividades paralelas que aún se encuentran en fase de gestación. “La Fundación Alalá y la Hermandad del Rocío de Triana dejarán su identidad antes y durante el festejo”, apostilló el hermano mayor.
El Litri, más breve, destacó las facilidades y la “tremenda ilusión” que había encontrado en los toreros anunciados y los ganaderos donantes ubicando las circunstancias especiales de unas fechas, en el confín de la temporada, en la que muchos de ellos asumen compromisos de gran peso y el desgaste de toda la campaña. Fermín Bóhórquez, finalmente, desveló que fueron los propios toreros, empezando por Morante, los que le acabaron espoleando para que volviera a ceñirse los zahones por un día. Habían ido a verle a Málaga, donde toreaba el de La Puebla, para vincularlo al empeño. “Tira para delante”, fueron las palabras del matador cigarrero picando al veterano rejoneador para que abriera el cartel. No tardó el aceptar el reto. “Estas cosas te dan una inyección de vida inigualable”, reconoció Fermín declarándose contagiado por ese “entusiasmo”.
El evento está anunciado con un cartel de la artista plástica Adriana Torres que ha escogido una composición figurativa en la que retrata el ensimismamiento de un torero de montera calada. “Los que conocen mi obra saben que yo trabajo mucho sobre la profundidad y he querido reflejar un momento sagrado para el torero, cuando mira dentro de sí mismo antes de jugarse la vida”, argumentó la pintora advirtiendo, a título personal, que el cuadro constituía un homenaje a su propio padre, Esteban Torres.
El festival sigue la estela marcada por la Hermandad de la Macarena que lo organizó en 2018. Al año siguiente fueron las cofradías del Baratillo y la Esperanza de Triana las que pudieron engrosar sus bolsas de caridad gracias a la celebración de un segundo festival que, tras el paréntesis de la pandemia en 2020 y 2021, tuvo continuidad en 2022 con el Gran Poder bajo la batuta de Emilio Muñoz. Es el turno de la Hermandad del Rocío de Triana y la Fundación Alalá. La siguiente en la cola es la cofradía de los Gitanos.