González-Écija: «El toreo es un modo de vida»

Entrevista. El joven novillero de la ‘Sartén’ de Andalucía es el flamante triunfador del ciclo de promoción de nuevos valores de la torería que se ha celebrado en la plaza de la Maestranza durante el mes de julio

26 jul 2019 / 14:12 h - Actualizado: 26 jul 2019 / 14:21 h.
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  •  Jaime González-Écija. / Toromedia
    Jaime González-Écija. / Toromedia

Jaime González-Écija ha sumado el nombre de su pueblo a su apellido. Está orgulloso de ese origen, del apoyo de los suyos... En su incipiente carrera ya puede sumar este importante triunfo que, más allá del flamante vestido que regala la Real Maestranza, le abre nuevas puertas en su incipiente carrera. El debut con picadores ya está próximo y el joven novillero de la ‘Sartén’ sabe que las cosas no serán fáciles a partir de ese momento. Estas son sus impresiones a pocas horas de resultar ganador en el ciclo de promoción de nuevos valores que ha llenado la noche de los jueves de julio en la plaza de la Maestranza.

¿Qué tal se despierta uno después de resultar triunfador de este ciclo?

Las sensaciones son muy positivas. Recuerdo las emociones que sentí en la plaza a la hora de realizar las distintas faenas. Es cierto que si nos ponemos a analizarlo todo te da que pensar un poco el tema de la espada. Eso es lo que más preocupa pero, en cualquier caso, el balance es bueno. Creo que debo estar satisfecho.

Son dos noches distintas, dos sensaciones diferentes...

La verdad es que en el primer compromiso llegué un poco presionado. Han sido tres novillos, tres oportunidades que había que aprovechar y el día de antes estaba un poco nervioso. Eso sí, cuando llegué a Sevilla me mentalicé para disfrutar la jornada desde por la mañana y de una oportunidad así: la de torear en la plaza de la Maestranza. Así lo hice y al pisar el albero la presión se fue y salieron las cosas. Del mismo modo pasó ayer (por la noche del jueves). Es verdad que la primera vez es especial porque te impacta todo y es más emocionante. Pero cada tarde es distinta y por ahora he salido encantado de cada tarde que he salido a la Maestranza. Es impresionante.

Los festejos comenzaban a las 21.30... ¿Se han hecho muy largos los días?

Uf, sobre todo la tarde. Se hace muy larga. Hay que darle muchas vueltas a la cabeza para concienciarte y prepararte pero está bien. Es una buena hora para torear en verano.

Ha matado tres novillos en Sevilla. Podemos analizarlos uno por uno.

El primero, de Juan Pedro Domecq, pudo ser cómodo para el torero dentro de lo que puede serlo un animal bravo. Eso sí: le faltó un poco de empuje y un poco de emoción para facilitar el triunfo. La espada me ayudó muchísimo para cortar la oreja. Tenía cositas que intenté resolver y con el espadazo me pude llevar el trofeo. En la final me encantó el primero de Jandilla. Fue extraordinario. El segundo tuvo más teclas que tocar, resultó mucho más complicadillo pero la espada, una vez más, me funcionó y le pude cortar la oreja.

Fue un novillo que presentó muchos problemas. La clave estaba en resolverlos y aguantar mucho. Le llegó a poner los pitones en los tobillos varias veces.

Era paradito y tardo. Tenía cierta calidad en la primera parte del muletazo pero luego empezaba a levantar la cara. Intenté hacer las cosas lo mejor que pude y sobre todo intenté estructurar la faena. Se trataba de que tuviera la máxima repercusión posible de cara al público.

Ha hablado de la espada. En este ciclo es básico echar abajo los novillos cuanto antes para obtener los trofeos.

La espada es fundamental y lo estaba viendo claro últimamente. Al primero le pegué dos pinchazos y una estocada y al segundo un espadazo. Tengo que ver el vídeo para ver lo que tengo que corregir pero mis sensaciones son buenas.

¿Ha podido celebrarlo?

Bueno, ha sido una celebración ligerita. Ahora toca prepararse, seguir entrenando... El día 8 toreo en Gor, un pueblo de Granada. La temporada va a ser larga gracias a los triunfos de Canal Sur y Sevilla. Ahora toca disfrutarla. Se están abriendo muchas puertas. Además de los éxitos que haya podido conseguir me está sirviendo mucho la ayuda del pueblo de Écija para torear mucho y que mis paisanos me acompañen. Eso es muy bonito.

Nombrar a Écija es acordarse de su olvidada plaza de toros. Torear allí ahora es casi un imposible.

Hablan de temas de seguridad de la plaza... la verdad es que no sé muy bien el lío que hay pero no se pueden dar espectáculos. Creo que se va a solucionar lo antes posible para que podamos torear en Écija y todos podamos disfrutar de nuestra plaza. Tengo que recordar la cantidad de consejos de toreros antiguos, de banderilleros, aficionados, los chavales que quieren ser toreros... Écija es uno de los sitios más taurinos de Andalucía aunque ahora no podamos tener toros. La Fiesta nunca se perderá y seguro que los vamos a volver a tener.

Además se ha forjado en la Escuela de Tauromaquia de Écija... ¿Cómo y cuándo empezó a querer ser torero?

Yo he sido aficionado desde pequeño pero comencé a frecuentar la escuela por primera vez gracias a mi hermano. Aún era la época del maestro Pepe Luis Vargas. Después hubo un paroncillo en el que casi desaparece la escuela. Dejó de funcionar. En 2014 El Ciento (José María Fijo) se hizo cargo de ella y empezó a recolectar chavales. Me llamó y hasta ahora...

Pues no va mal la cosa...

Por ahora no pero tiene que seguir (risas).

¿Tiene ganas de debutar ya con caballos?

Debuto el 9 de septiembre en Valdilecha, un pueblo de Madrid, gracias a un certamen que gané el año pasado: el de la Ribera del Tajuña. Ésa será mi presentación con picadores pero tengo ganas de torear todas las novilladas que tengo antes y después del debut. Ahí está ese miedo, esa incertidumbre al pequeño o gran parón que muchos experimentan después de verle la cara al utrero. Pero la afición es la clave, estar todo el día entrenando. Al final a todos nos llega nuestra oportunidad y hay que tratar de aprovecharla.

Ha ganado el preciado vestido que regala la Real Maestranza. ¿Ya tiene claro el color?

La verdad es que no sé muy bien cómo va el proceso para encargarlo pero lo importante, más allá del triunfo y el vestido, son las sensaciones que me transmitió la plaza. Eso es lo que me quedo para mí. Lo demás también, por supuesto, y tengo que valorar la importancia que tiene pero sobre todo destaco las sensaciones.

¿Está sonando mucho el teléfono?

La verdad es que sí. Gracias a Dios está sonando. Lo que hay que hacer es tomar las decisiones más acertadas y responder en la plaza.

¿Merece la pena todo esto?

Por supuesto. Dos días antes de torear en Sevilla estaba con un compañero mío, con el que más me preparo. En Écija y en verano hay que ponerse a entrenar muy tarde o muy temprano para evitar el calor. Eran las once de la noche y pasamos por el sitio donde estaba toda la gente de nuestra edad, saliendo, tomando copas... Le comenté a mi amigo: “Nosotros nos estamos privando pero ya recogeremos los frutos de lo que estamos sembrando”. Es una anécdota pero luego salieron las cosas. Todo esfuerzo tiene recompensa y en realidad no es tal esfuerzo porque haces lo que de verdad te gusta. El toreo es una forma de vida. Por eso digo que tampoco tenía nada que celebrar. Todos los días entreno, corro... así es como me siento bien. Los triunfos dan confianza para saber que todo lo que haces, todo lo que entrenas tiene su recompensa. Ahí está el mérito de tantos novilleros con caballos que se quedan parados y mantienen la afición para entrenar día a día. Eso es lo que marca la diferencia.

Perfil de urgencia

Personal: Nació en Écija, 10 de noviembre de 1999.

Formación: Es alumno de la Escuela Municipal de Tauromaquia de Écija, dirigida por el diestro José María Fijo ‘El Ciento’.

Trayectoria: Debutó en Camas el uno de mayo de 2016. Ha sumado más de 20 novilladas destacando su paso por las plazas de Málaga y Salamanca. Cortó la única oreja que se concedió en el tercer festejo clasificatorio a un novillo de Juan Pedro Domecq que planteó algunas dificultades. Escogido para la final, acabó imponiéndose a sus compañeros después de cortar otra oreja –de nuevo la única de toda la novillada- a un complicado eral de Jandilla con muchas teclas que tocar. Pudo perder otro trofeo de su primero por pinchar antes de agarrar la estocada definitiva.