- El matador peruano, el pasado domingo, n la mesa de operaciones junto al equipo del doctor Jiménez.
Las secuelas de la cornada del pasado 5 de agosto siguen trayendo cola y la vuelta de Roca Rey sigue sin tener fecha fija. El torero, que había puesto el objetivo en la plaza de Valladolid, –estaba anunciado junto a El Juli y Emilio de Justo para estoquear la corrida de Victorino Martín por primera vez en su vida- no podrá hacer esta tarde el paseíllo en el coso pucelano después de verificar los problemas de movilidad de la pierna afectada en un entrenamiento celebrado este jueves en la ganadería de Juan Pedro Domecq que tuvo que ser suspendido tal y como ha explicado el servicio de prensa del torero a través de un comunicado difundido anoche.
“Después de este incidente, el torero volvió a la Clínica Nica, donde el doctor Domingo Jiménez examinó la herida y recomendó prolongar el período de reposo para permitir una cicatrización completa y total restablecimiento de la herida”, precisa el mismo comunicado. El entorno del torero no precisa una fecha concreta para su vuelta a la actividad que el propio Roca fía a “recuperarse al 100% para volver lo antes posible en plenas facultades”.
Operado en Sevilla
Andrés Roca Rey había sido intervenido por el mismo facultativo en la madrugada del pasado domingo después de actuar en la tradicional Corrida Goyesca de Ronda por culpa de las secuelas de la cornada sufrida en el gemelo derecho el pasado 5 de agosto en la plaza del Puerto de Santa María. Desde entonces vuelve a encontrarse en el dique seco.
El diestro peruano ya había podido reaparecer el pasado 16 de agosto en Málaga y aunque había cumplido todos sus compromisos profesionales hasta llegar a Ronda, “la herida no ha evolucionado según lo previsto y presenta un proceso infeccioso y de difícil cicatrización por lo que se ve obligado a revisión quirúrgica y estudio ecográfico” según detallaba el parte firmado por Domingo Jiménez que le operó en la madrugada del pasado domingo.
Antecedentes
Roca Rey Roca Rey había llegado a El Puerto de Santa María después de sufrir dos fortísimas volteretas en la plaza de Huelva, coso que había escogido para reaparecer después de la fortísima paliza que ya había sufrido el 25 de julio en Santander que le impidió viajar a su país natal para atender algunos compromisos profesionales.
En El Puerto fue cogido por su primer toro que le alcanzó cuando trataba de dar un muletazo cambiado por la espalda. Había sufrido una cornada de dos trayectorias ascendente y descendente de 18 centímetros en la cara interna de la pierna y a la altura del gemelo derecho, que según rezaba el parte médico firmado por el doctor Carabot Rodríguez, contusionó la musculatura interna gemelar.