Un nuevo faenón para los anales en la plaza de Huelva le ha servido para ponerse de nuevo a la vanguardia del escalafón taurino más allá de números o estadísticas. Aguado, quién lo duda, es el torero al que todo el mundo quiere ver. El que mueve aficionados, llena coches y trenes, abarrota restaurantes... Ese trasteo revelador en el coso de la Vega Larga ya ha sido comparado con el zambombazo de Sevilla o aquella faena del ‘silencio’ en la isidrada. Su nombre, para qué negarlo, revaloriza y aporta un providencial aire fresco a muchos carteles. En su agenda agosteña figuran las plazas de Fuengirola –este mismo viernes- Pontevedra, Huesca, San Sebastián, Béziers, Gijón, Almería, Málaga, Bilbao, El Puerto –punto de mira de muchos aficionados sevillanos-, Tarazona... El día 26 de agosto también está anunciado en Colmenar Viejo. Era el único duelo, sorprendentemente, que iba a mantener en todo el verano con Andrés Roca Rey, que permanece en el dique seco por una lesión vertebral. Cosas de la política taurina...
El caso es que la presencia del emergente diestro sevillano también ha supuesto un revulsivo para la llamada ‘Corrida Picassiana’ de Málaga. El festejo fue presentado este jueves en el Palacio de la Aduana de la capital de la Costa del Sol. La cita es el próximo 19 de agosto. El cartel, con toros de Garcigrande, anuncia a Julián López ‘El Juli’ y José María Manzanares aunque el máximo atractivo, ésa es la verdad, lo pone la presencia fresca y rutilante de Pablo Aguado. El joven diestro acudió a la presentación del evento señalando que “Málaga es una ciudad con la que tengo mucha conexión; mi familia materna es de Málaga y me hace mucha ilusión”. “Es un privilegio para mí estar en este homenaje de la ciudad a Picasso”, remachó el matador.
Pero más allá del ‘meeting’ picassiano, Aguado tuvo palabras para evocar sus años de forja como torero hasta llegar a estos días de ilusiones compartidas: “Es muy duro llegar, hay muchas tardes de sinsabores en las que no ves nada. Esas circunstancias son las que te hacen madurar. El entrenamiento diario, el estar rodeado de gente que te anima... hace que cuando llega un momento así se disfrute más”. En la memoria reciente seguían resonando triunfos como el de Sevilla, la faena definitiva que le convirtió en figura con veinte pases que pusieron boca abajo a todo el toreo. “Uno no es consciente del todo con la adrenalina de la tarde y después de dos de semanas de grandísima presión. Terminas de ser consciente con el tiempo, pero poco a poco. El triunfo en Sevilla servirá para mirar atrás cuando haya tardes peores, servirá para coger fuerzas”, explicó Pablo.
Aguado hizo estas y otras declaraciones en el transcurso de un coloquio dirigido por el periodista sevillano José Enrique Moreno, actual responsable de comunicación de la plaza de La Malagueta. El torero señaló, en relación con el escenario, que “La Malagueta es una plaza de máximo nivel y es una responsabilidad inmensa. Uno tiene que ser consecuente con la realidad, tengo que dar muchas gracias por todo lo que estoy pasando, pero insisto en la gran responsabilidad que conlleva”. Pablo también hizo una apuesta por el futuro de la Fiesta: “Estábamos en un momento bajo que ya hemos pasado. Creo que le queda mucho tiempo, sobre todo cuando ves las plazas llenas de gente joven, o la Feria de San Isidro con 30 días de toros seguidos... Se me hace muy difícil pensar que la Fiesta pueda desaparecer con esa realidad”, concluyó el matador.
Loren Pallatier vuelve a ser el responsable de la escenografía de la corrida Picassiana. El creador francés realiza por séptimo año esta ambientación efímera del coso de La Malagueta. “La Picassiana de este año tiene, como siempre, mucho trabajo; ni más ni menos que 300 tablas, 40 medallones y una sorpresa que no quiero desvelar”, anunció Loren, que este año ha contado con el torero malagueño Saúl Jiménez Fortes para la realización de sus clásicas ‘toreografías’, ese ejercicio creativo que rescata el trazo y la grafía del toreo impregnando capotes y muletas en tinta negra que queda impresa en inmensos paneles dispuestos sobre el suelo.
También hubo lugar para el espaldarazo de las autoridades. El empresario de La Malagueta, José Carlos Escribano, señaló que “la Picassiana es un ejemplo de cómo la cultura está imbricada en la Tauromaquia. Cuanto más se implique a la fiesta en la sociedad, más se implicará la sociedad en la fiesta”. La delegada de Cultura y Fomento de la Junta de Andalucía, Carmen Casero, explicó que “esta corrida Picassiana es única en el mundo y desde la Junta hemos querido ser anfitriones de esta presentación, de este modo ponemos en valor ambos mundos: el arte y la Tauromaquia”. Finalmente, el diputado de asuntos taurinos de la Diputación Provincial, Víctor González, puso el foco en la figura de Pablo Aguado, remachando su condición de estrella indiscutible de este cartel: “Estás en un momento único y queremos disfrutar de ti en la Picassiana”. Pues eso...