Roca y Aguado, el duelo demorado...

El astro peruano y el nuevo ídolo de la afición hispalense volverán a verse las caras en el coso de Los Califas más de dos años después de su primer y único encuentro como matadores

14 may 2021 / 11:31 h - Actualizado: 14 may 2021 / 11:34 h.
"Toros"
  • El diestro sevillano Pablo Aguado abrió la Puerta del Príncipe el 10 de mayo de 2019, la única vez que ha alternado hasta ahora con Roca Rey. Foto: Toromedia
    El diestro sevillano Pablo Aguado abrió la Puerta del Príncipe el 10 de mayo de 2019, la única vez que ha alternado hasta ahora con Roca Rey. Foto: Toromedia

Roca Rey y Pablo Aguado volverán a verse las caras en una plaza de toros. Lo harán este mismo sábado en el segundo festejo de la feria de Córdoba con el rejoneador Diego Ventura actuando por delante y oficiando, de alguna forma, de sorbete desengrasante para un encuentro tantas veces aplazado que constituye el argumento taurino más apasionante del interesante ciclo organizado por Lances de Futuro. Se suman varias claves que convierten la cita en el centro del toreo: será la primera corrida que se celebre en una plaza de primera en la temporada 2021 –es la segunda, y en el mismo escenario, desde que comenzó la pandemia- y es el escenario de la reaparición española de Roca Rey, vis a vis con el torero que, seguramente, más le ha apretado las tuercas en una plaza de toros.

Conviene poner la moviola en funcionamiento para retroceder aquel 10 de mayo de 2019 en la plaza de la Real Maestranza de Sevilla. Fue la fecha de la gran eclosión como figura del diestro sevillano pero también era, a priori, el día que Roca pretendía coronarse como gran triunfador de la Feria de Abril y número uno indiscutible del toreo. ¿Qué pasó aquella tarde? Roca ya había tomado el cetro de aquella feria, la última que se ha celebrado hasta ahora, después de cuajar una faena apabullante a un toro de Núñez del Cuvillo del que le llegaron a pedir el rabo. La cumbre, en ese momento, parecía inalcanzable pero el peruano aún tenía que cumplir un tercer compromiso junto a Morante y Aguado para estoquear una corrida de Jandilla. Era el cartel que había despertado mayor expectación en todo el ciclo.

Roca y Aguado, el duelo demorado...
Roca Rey en su última actuación, hasta ahora, en la plaza de la Maestranza. Foto: Toromedia

Del 10 de mayo al 10 de julio

Pero fue Aguado el que se llevó el gato al agua aquel 10 de mayo culminando una actuación para la historia. Lo de menos son las cuatro orejas, la Puerta del Príncipe que abrió... Perdura el recuerdo, la memoria, el tacto, el impacto y el halo de aquella grandiosa faena que refrescó el tronco más clásico del toreo coronando a Aguado como nuevo ídolo de la afición hispalense pero, sobre todo, como uno de los matadores más interesantes de la última hornada. El sevillano hizo hervir el agua de verdad al limeño, que a pesar de usar toda su artillería salió de la plaza haciéndose demasiadas preguntas. No volvieron a verse en un patio de cuadrillas aunque llegaron a estar anunciados juntos en una única ocasión en la temporada de 2019. Tenían que haber hecho el paseo juntos en la plaza de Colmenar Viejo pero la compleja lesión de Roca, que tuvo que cortar por lo sano, impidió ese encuentro.

A partir de ahí sus caminos han estado separados durante dos años exactos. Pero es que el peruano, además, no torea en España desde la Feria de San Fermín de 2019 donde había contraído dos compromisos. Sólo pudo torear uno, en el que se resintió de la compleja lesión que se había producido en Madrid el 22 de mayo anterior después de ser volteado brutalmente por un sobrero del Conde de Mayalde. Posteriormente se barajaron distintas fechas pero la dolencia no dio tregua. A partir de ahí, Roca ha visto aplazarse sus sucesivas reapariciones en España en distintas ocasiones. Primero fue el proceso de recuperación de la lesión; después, la frustrante temporada de 2020, mutilada por el covid y finalmente, las ferias organizadas en Sevilla y Jerez para este 2021, que han quedado aplazadas para septiembre y julio respectivamente por los problemas de aforo derivados de las restricciones sanitarias impuestas por la Junta de Andalucía.

Citas que no se celebraron

Pero conviene recapitular. En la Feria de Abril de 2020, que fue anunciada pero no celebrada, tampoco coincidían en ninguna fecha. El asunto encalló de salida en torno a la lidia de la corrida de Garcigrande, impuesta por el equipo de Roca Rey en la fecha del Domingo de Resurrección. Pablo Aguado rechazó la ganadería y la entrada en el cartel de Talavante, en el que ya era fijo Morante, acabó cerrándole la puerta. Roca tampoco quería enfrentarse a los hierros de Juan Pedro Domecq y Jandilla, escogidos por Aguado, dificultando el definitivo reencuentro con su rival que, con cuatro tardes contratadas por coleta en el abono sevillano, no iban a cruzarse en ninguno de esos carteles que acabarían convertidos en papel mojado por imperativo del coronavirus que acabó forzando la cancelación de todo el abono sevillano en la temporada 2020.

La temporada se había fundido a negro pero en el verano de aquel 2020 aún hubo una oportunidad para el reencuentro que quedó frustrada después de que la Junta de Andalucía diera marcha atrás en las medidas de aforo que permitían la apertura de las plazas al 50% de su capacidad. No hace falta contar de nuevo el culebrón interesado que rodeó la celebración de la corrida del 6 de agosto en El Puerto. El caso es que Francisco Rivera Ordóñez, empresario de Ronda, les había anunciado juntos para la Goyesca junto a Morante pero la restricción del aforo que sucedió al festejo portuense acabó frustrando el empeño y aplazando una vez el duelo.

Hubo que esperar, una vez más, al anuncio de la temporada de primavera de este 2021, preparada por la empresa Pagés. Los aficionados volvieron a albergar la ilusión de contemplar juntos los nombres de Aguado y Roca juntos en el mismo cartel. Así los anunció Ramón Valencia en un acto rodeado de incertidumbres. Sus nombres volvían a estar en el mismo casillero, con Morante por delante y los toros de Victoriano del Río. Los tres ases tenían que haber inaugurado el pasado 18 de abril ese ciclo que se gestó condicionado a la posibilidad de abrir la plaza de la Maestranza al 50% de su capacidad. Es historia muy reciente, un proceso delirante en el que la Junta de Andalucía apuró todos los plazos posibles para aprobar el plan de contingencia presentado por la empresa Pagés. El gobierno andaluz desistió de interpretar la norma estatal imponiendo el famoso metro y medio de espectador a espectador. Finalmente, los Pagés se vieron obligados a cancelar la programación prevista demorando una vez más el enfrentamiento entre ambos toreros, dos años después de su único encuentro.

Los aficionados pusieron en ese momento la vista en la plaza de Jerez. Su empresario, Toño Matilla, los había anunciado juntos el pasado 8 de mayo pero el ciclo también estaba sujeto a poder vender la mitad de la taquilla. En esa tesitura se vio obligado a trasladar los festejos previstos a finales de julio mientras Aguado y Roca volvían a retrasar una vez más su encuentro definitivo a la feria de Córdoba donde podrán verse las caras este mismo sábado. La corrida mixta de Córdoba, que agotó el billetaje disponible en pocas horas, será la antesala del mano a mano programado en el coso madrileño de Vista Alegre, el próximo 19 de mayo. Roca y Aguado alternarán ahí en competencia directa, sin testigos con reses de distintas ganaderías, añadiendo sal y pimienta a una temporada que empieza a despertar después de un mal sueño. La expectación está servida pero el primer duelo ya está aquí. En Córdoba tuvo que ser.