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El consejero Emilio de Llera. / El Correo
El consejero de Justicia, Emilio de Llera, terminó pidiendo perdón en un comunicado por sus «valoraciones críticas», en una entrevista en Ondaluz TV la noche del martes, sobre el sistema judicial y los votantes de Podemos. Pero sus «más sinceras disculpas» respondían ayer por la tarde al revuelo político, dentro y fuera del Parlamento, y mediático que causaron sus declaraciones. La oposición llegó a pedir el cese del consejero y la intervención directa de la presidenta, Susana Díaz, en el asunto.
Las disculpas de De Llera van dirigidas a quienes hayan interpretado como «ofensivas» sus palabras sobre el funcionamiento del sistema judicial así como por su referencia «desafortunada» a los votantes de Podemos. Y es que el consejero criticó que los jueces de instrucción «actúan como si fueran reyes de taifa», que además «puede meter el dedo en el ojo a quien le dé la gana y sea después absolutamente irresponsable por sus actos», y que los fiscales «no son independientes» porque pueden «recibir instrucciones de superiores jerárquicos según el color político», además de advertir de que «si sube Podemos quiere decir que la sociedad está enferma porque no ha estado por un gobierno de izquierdas», porque la formación morada «no ha sido capaz de buscar una solución» para evitar la repetición de las elecciones.
En la nota difundida por su Consejería, el titular de Justicia explica que realizó estas «valoraciones críticas al sistema en su conjunto y no a personas u órganos concretos, dentro de una reflexión general sobre la necesidad de una mejora general y modernización de la Justicia en Andalucía y España» y recuerda que uno de los ejes de esta legislatura de la Consejería de Justicia es «precisamente promover un Pacto por la Justicia para la mejora de la Justicia, que requiere del trabajo conjunto de todos los grupos políticos, a los que vuelvo a apelar».
El consejero sostiene en la nota que, en una «línea de crítica constructiva», manifestó la necesidad de «reformar la Ley de Enjuiciamiento Criminal para lograr una instrucción más rápida» siguiendo el ejemplo del «sistema francés, en el que la actuación del fiscal permitió contar con una primera respuesta a los pocos días del accidente aéreo, mientras que nuestro sistema hace que las instrucciones tiendan a eternizarse».
En cualquier caso, aunque hay quien sitúa a Díaz tras estas disculpas, la presidenta no entró a valorar las declaraciones de su consejero y aseguró que su postura es el «respeto siempre a la Justicia, cuando estoy de acuerdo con sus decisiones y cuando no» y defendió que «todos respetamos la separación de poderes y no ataquemos a la Justicia cuando detienen a un alcalde de tu partido y se actúe como martillo de herejes cuando se cree que le hace daño al adversario».
Por su parte, la Secretaria de Estado de Justicia, Carmen Cortés, de visita ayer en Sevilla, lamentó las declaraciones de Emilio de Llera y señaló que «es una pena que responsables públicos» pongan en duda el funcionamiento de «instituciones básicas de la democracia» si bien añadió que «cada uno es responsable de sus palabras». De Llera, fiscal en excedencia, denunció también en la entrevista que el Ministerio Público recibe instrucciones del Gobierno. «El tendrá sus razones para decirlo», respondió Cortés.