La librería Casa Tomada acogerá el próximo 20 de octubre la presentación del libro Mundos, una nueva entrega de la sevillana María D. Almeyda que acaba de ver la luz en el sello Tau. En el mismo acto hará lo propio Elena Marqués con Distintas formas de ir a la deriva, publicado en la misma editorial.

Después de su incursión en el cuento titulada Algunos van a morir, Almeyda vuelve a esta disciplina sin reunciar a muchos de los aspectos que caracterizaban el libro anterior. «Mundos consta de 13 relatos en el que se van organizando por etapas diferentes métodos de conducta social y antropológica. Comenzamos por los mundos de hoy, de ahora, con problemas de comportamiento social, familiar, etcétera», comenta la autora.

«Mundos cercanos y Mundos intermedios son las dos primeras partes del libro. El primero trata de cosas, historias y situaciones cercanas, que pueden darse con facilidad hoy día en cualquier sociedad y en cada casa», adelanta. «En Mundos intermedios es donde nos metemos en el mundo onírico, de los sueños casi imposibles, aunque todo es posible hoy en dia», explica.

«Hay una tercera parte en la que entra en juego la vida de las máquinas, la cercanía de humanización de los aparatos con los que convivimos diariamente. Ordenadores, instrumentos y maquinaria científica de hospital y demás ingenios», explica. «Se titula Mundos lejanos, y se adentra en la posibilidad de que las máquinas creen vida, ya que tienen la inteligencia, no es de extrañar que sientan como un ser humano».

«Mundos futuros es la última parte del libro, y habla de la posibilidad de crear o seguir haciendo la vida en otras dimensiones», agrega Almeyda. «Consta de cuatro relatos de tema futurista casi de ciencia-ficción, pero sin tecnología», subraya. «Quiero decir que tanto los personajes como las situaciones pertenecen al mundo casi real de los humanos, pero situados en una dimensión estratosférica».

Cuando se le pregunta por posibles influencias, prefiere hablar de «una especie de muso» que ha inspirado un par de piezas, «un amigo llamado Jesús Márquez. De él nació la idea del relato Máquina y de Un corazón de materiales fríos, los dos en la serie Mundos lejanos».

Pese a considerarse vocacionalmente poeta, María D. Almeyda asegura que «me gusta el relato, pero mi poesía es más de tipo intimista y sin dejar de hacerla, me gusta ir alternando una cosa con la otra», dice.

Eso sí, siempre desde un compromiso con el mundo que le ha tocado vivir. «Si no hay compromiso, no se escribe para nada. Hay que buscar siempre decir algo que le duela al que lee, si no mejor no escribas nada. Aunque la vida ya duele demasiado, pero es diferente un cuento de una noticia redactada desde la frialdad de unos titulares», apostilla.