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El juez Ángel Márquez (a la izquierda), durante la primera sesión del juicio contra Lopera / Jesús Barrera
El juicio contra Manuel Ruiz de Lopera y otros siete acusados por presuntas irregularidades al frente del Betis ha modificado su calendario nada más empezar. Estaba previsto que este 18 de abril se dedicase a las cuestiones previas, pero al final sólo han intervenido las defensas de los imputados. El magistrado que preside la sala, Ángel Márquez, ha aplazado la intervención de las acusaciones y la fiscal Margarita Viera para el próximo martes, 25 de abril, a las 9.30 de la mañana.
La primera sesión ha tenido como actriz principal a la abogada de Lopera, Encarnación Molino, que ha solicitado la expulsión de la causa de las tres asociaciones acusadoras (BXV, PNB y Liga de Juristas Béticos) al considerar que no pueden ejercer la acusación particular al no ser víctimas del presunto delito. Ese hilo argumental ha sido seguido por los abogados de Javier Páez, Mercedes Ferraro, Teresa González y Ana María Ruiz.
La defensa de Luis Oliver, por su parte, se ha preguntado por qué su cliente se sienta en el banquillo cuando la principal víctima, el Betis, retiró su acusación hace unos días.
El caso es que esta primera vista no ha llegado a las tres horas de duración, con un receso tras la intervención de Molino que deparó una de las estampas más llamativas de la mañana: Lopera hablando distendidamente e incluso bromeando con Adolfo Cuéllar, de la Liga de Juristas Béticos.