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Pepe Mel, en rueda de prensa al terminar el partido / Pepo Herrera
Pepe Mel compareció en la sala de prensa del Benito Villamarín tras el partido, donde reconoció la justicia del triunfo eibarrés y habló de las posibles soluciones a la mala racha que atraviesa el Betis. «En estos momentos hay tres soluciones: la primera sacar un mejor rendimiento a los jugadores que tenemos, la segunda acudir al mercado invernal en busca de refuerzos y la tercera echar al entrenador. Ésas son las soluciones que conozco».
El técnico bético dijo no estar afectado por los gritos que se escucharon en su contra desde la grada, aunque la procesión iba por dentro. «No tengo problemas. Es fácil echar a un entrenador. El público es soberano pero se equivoca si le pita un futbolista de su equipo. El club tiene mi cargo a su disposición desde ya».
Pese a estas palabras, Pepe Mel asegura sentirse con fuerzas. «Yo mañana a las diez estaré en el entrenamiento preparando el partido tan complicado que tenemos en 72 horas. Lo más importante ahora es levantar el ánimo del vestuario, hay que hacer autocrítica. Nunca me pasó en un equipo de estar tantos minutos sin hacer un gol. Habíamos logrado cierta seguridad defensiva pero en ataque nos falta mucho y la desconexión de Rubén Castro con Ceballos y el resto de compañeros ha sido muy grande. El Eibar ha sido superior desde el minuto uno y el 0-4 final es totalmente justo».
«EL EIBAR NOS HA SUPERADO EN TODO»
Esta es la rueda de prensa completa que ofreció Pepe Mel tras el 0-4 ante el Eibar:
Derrota ante la Eibar: “Hay que olvidarse de lo que puede ser o dejar de ser la SD Eibar. Ha sido un buen equipo que nos ha superado en todo y que lo ha hecho muy bien. Les he felicitado, han trabajado muy bien y el resultado es justo. Hemos perdido el partido en la primera parte, jugando con un ritmo de balón muy bajo y haciéndolo todo muy previsible, con mucha distancia entre Ceballos y Rubén Castro. Además, hemos tenido a Rubén a mucha distancia de todos sus demás compañeros. El ritmo que hemos puesto ha sido bajísimo en comparación con el que ha ofrecido la SD Eibar. Ante un equipo bien armado y que trabaja bien, que sabíamos que iba a salir así y que suele bajar el ritmo en el minuto 60, no hemos sido capaces de llegar a ese minuto metidos en el partido. El segundo gol ha sido una losa tremenda porque veíamos que éramos incapaces a ese ritmo. Con esa distancia entre líneas era imposible que nada nos saliera bien”.
¿Qué debe arreglar de cara al próximo miércoles?: “Hay que buscar soluciones, pero es cierto que tendremos poco tiempo de aquí al miércoles. Cuando uno juega un partido tan seguido lo principal es levantar al vestuario, que ahora está horrorosamente mal. A 72 horas de un nuevo partido eso es lo principal, lo anímico cuenta mucho, todos andamos muy mal. Luego vendrá lo segundo. Una de las cosas ya la he dicho antes. Si hay tanta distancia entre el mediapunta y el delantero es muy difícil generar fútbol cuando por fuera tampoco llegas. Tendremos que cambiar cosas, durante tiempo optamos por protegernos en lo defensivo, pero si no pisas área y no haces goles, o quedas 0-0 o es muy difícil. A todo se ha unido que nosotros no hemos estado bien desde el minuto uno. El equipo estaba como fuera del partido, hemos cambiado mucho respecto a la primera media hora que vi en el Camp Nou o contra el Sevilla. La diferencia en cuanto a lo que han ofrecido mis jugadores hoy ha sido abismal”.
Cánticos de un sector de la grada pidiendo la marcha del enhtrenador: “No tengo ningún problema. Soy un entrenador de fútbol que está a disposición del club, no me aferro a ningún puesto y mucho menos a éste. Es fácil echar a un entrenador, no hay ningún problema por mí. No me produce nada, el púbico es soberano y protesta por lo que ve. Lo comprendo, no puedo decirle al público que está equivocado. Sí creo que se equivocan los aficionados en pitarle a un futbolista, pero no al entrenador porque el equipo ha jugado horrorosamente mal. Cuando eso pasa hay que cargar con el máximo responsable. El club tiene mi cargo a su disposición desde ya mismo. No silbaría a ningún futbolista del Real Betis en un partido porque afecta a los otros 10 que ahora están jodidos. Cuando la gente silba a uno está silbando a todos. Estamos más pendientes de levantar el ánimo del compañero que del partido. Eso no nos beneficia, el público puede hacer lo que le dé la gana, pero mientras un jugador lleva el escudo de este club, al que todos queremos mucho, hay que intentar levantarle y que luego al final del partido la gente se exprese como quiere. El entrenador es el máximo responsable de todo lo que pasa malo”.
Soluciones: “La solución puede pasar por tres cosas. La primera, seguimos juntos todos y es trabajo del cuerpo técnico intentar sacar muchas más cosa a futbolistas que hasta ahora han dado muy poco. Otra solución es el mercado invernal y que el club, con el mucho o poco dinero que tenga para ello, que no lo sé, traiga gente que nos dé y nos ayude en las situaciones que somos mejorables. La tercera vía es cambiar al entrenador”.
¿Cómo se encuentra?: “Me siento bien, no tengo ningún problema. Los cargos en los equipos de fútbol desgastan. Está claro que el Pepe Mel de hace dos años tenía mucho más adeptos que el de hoy. Cuando un equipo de fútbol no rinde al nivel que todos pensamos, pasa esto. Estoy decepcionado conmigo mismo y con los jugadores porque podemos hacerlo mejor todos juntos. Eso es normal, cuando un club no da lo que creemos que tiene que dar, el entrenador es el más damnificado. Esto es así de siempre; era así ya el año pasado con el equipo primero y ascendiendo. Este año con el equipo en mitad de la tabla ya nos pasaba, más hoy si un equipo como la SD Eibar, a la que he felicitado y que lo ha hecho francamente bien, nos gana 0-4. Nos queda un mes francamente difícil”.
Refuerzos en el mercado invernal: “Preguntadle a Eduardo Macià. Hoy no es el día de eso, hoy es para reconocer errores y hacer autocrítica. Estamos haciendo las cosas mal, nunca me había pasado que un equipo mío estuviera tantos minutos sin hacer gol. Quiero hacer autocrítica en lo que a mí respecta y puedo mejorar. Mañana a las 10:30 empezaré a entrenar haciendo autocrítica con los futbolistas, que ellos también reconozcan las cosas que son mejorables. Todo lo demás no depende de mí”.
¿Se siente con fuerzas?: “Mañana a partir de las 10:30 horas estaremos entrenándonos para preparar el siguiente partido, que es un partido complicado. Mi mayor ambición y preocupación es levantar lo que he visto en el vestuario. Los futbolistas son personas, a veces se nos olvida eso. La cabeza cuenta mucho, ahora están muy mal. Si queremos encarar el partido que tenemos dentro de 72 horas al máximo nivel y con la exigencia que nos va a pedir ese partido, tenemos que empezar a trabajar ya”.