El Sevilla da ya por perdido a Monchi

El Sevilla ya da por perdido a Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi, su director deportivo en los últimos años y con el que ya negocia la rescisión de su contrato. El exportero comunicó este lunes de forma sorpresiva al consejo de administración del Sevilla que deja su cargo después de una década de éxitos al máximo nivel y 16 años comandando los designios deportivos del equipo. Este martes se ha ratificado sin mostrar dudas al respecto y en el club de Nervión, donde cundía el pesimismo por la mañana, la seguridad es ya total en estos momentos sobre las nulas posibilidades de rectificación del protagonista. Tanto, que Monchi y José María Cruz regresaron por la tarde al estadio para negociar el finiquito. No hubo acuerdo y todo quedará a expensas de lo que ocurra este miércoles desde primera hora. Tras varias reuniones acontecidas a lo largo de la mañana de este martes, con Cruz y un almuerzo con José María del Nido Carrasco, vicepresidente, nadie en el club sale aún de su asombro por el desarrollo de los acontecimientos, que recuerdan a otras salidas de gente importante no hace muchos años.

Son muchas las incógnitas que merodean a esta dimisión de Monchi, que tiene contrato con el Sevilla hasta 2020 y una cláusula de rescisión o indemnización de cinco millones de euros. Para empezar, el director deportivo insiste, tal y como hiciera el lunes, en que son exclusivamente razones personales las que le llevan a tomar esta decisión, que no tiene oferta de ningún equipo y que todo obedece a un agotamiento mental por estar en un club con demasiada implicación sentimental para él. Si es así, en el club se preguntan por qué da el paso ahora y no después del verano, con la planificación ya rematada y finiquitada. Todos intuyen en que el de San Fernando posee una oferta muy fuerte e inesperada encima de la mesa –probablemente de un equipo de la Premier inglesa– que no ha podido rechazar y que no ha sabido cómo afrontar la explicación de esa decisión después de haber dicho por activa y por pasiva, desde hace años y hasta hace tan sólo unos días, que no se iría del Sevilla por mucho dinero que le ofrecieran. En ese caso, el Sevilla estaría dispuesto a exigir la indemnización prevista para romper el contrato, cosa que no haría –o al menos negociaría– si Monchi efectivamente confirma que es simple agotamiento y que se toma un descanso. El nombre del Manchester United de Mourinho sigue pululando alrededor de este episodio en Nervión, aunque otras informaciones apuntan a otros clubes de menor entidad de Inglaterra que cuadran más con el asunto.

Monchi llegaba al Ramón Sánchez-Pizjuán sobre las 11 de la mañana para confirmar la noticia al resto de la dirigencia nervionense. El presidente se encontraba pendiente de un importantísimo asunto familiar y le ha pillado todo este terremoto más a contrapié incluso que al resto de directivos, que siguen a cuadros tras la comunicación el lunes de Monchi, quien no ha esperado a más adelante para transmitir esa decisión, lo cual acrecienta la teoría de que ha dicho que sí a la propuesta de otro club, el cual lo apremiaba. El todavía director deportivo del Sevilla salía del estadio pasadas las 13.30, sin hacer declaraciones. Después regresó y tampoco dijo nada. Tampoco el resto de personas que aparecían por allí: Óscar Arias, su segundo en el organigrama, Cruz y Del Nido Carrasco. A estas horas sigue el mutismo oficial del Sevilla, a la espera de una última reunión que pueda desbloquear definitivamente la salida de un hombre que ha hecho historia en el Sevilla.