Muy enfadado con la actuación de Vicandi Garrido se marchó también Fernando Llorente, protagonista en dos jugadas en las que fue agarrado en el área. «El arbitraje conmigo no ha estado nada bien, me pitaba faltas que no eran y luego me agarraban durante dos segundos en el área y no pitaba nada, incluso me decía que no me tiraba, nadie lo entendía porque todos lo veíamos en el campo...», reflexionó el delantero sevillista, quien analizó así el partido: «Fue una buena segunda parte y conseguimos empatar, con la sensación además de poder incluso ganar porque ellos no estaban bien, pero pasó una jugada que no esperábamos. Al principio no teníamos el balón y no podíamos crear jugadas. Ahora, a pensar en el jueves».