Montella exhibe a su Sevilla (0-3)

Partidazo y goleada con el mismo once que asaltó el Wanda en la Copa del Rey

20 ene 2018 / 15:05 h - Actualizado: 20 ene 2018 / 17:38 h.
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  • Nzonzi felicita a Muriel tras el 0-3. / Efe
    Nzonzi felicita a Muriel tras el 0-3. / Efe

El Sevilla parece haber hecho clic, parece haber tocado fondo y parece notar de manera notable la aportación táctica de Vincenzo Montella después de un arranque duro del italiano con un derbi mal gestionado y un planteamiento extraño en Vitoria. Lo demuestra la contundente victoria cosechada este sábado en el RCDE Stadium ante el Espanyol, al que goleó 0-3 con un planteamiento idéntico al dispuesto el miércoles en casa del Atlético de Madrid y usando a los mismos jugadores. Los goles de Franco Vázquez, Sarabia y Muriel, tres hombres muy poco usados por Eduardo Berizzo, hicieron buena la excelente disposición táctica, las solidarias ayudas defensivas y la nueva manera de atacar, repleta de acciones rápidas.

El riesgo de no agotar a los presumibles titulares de cara a un partido tan importante como el del martes ante el Atlético era en cierto modo asumible por lo bien que salió el Sevilla del Wanda y por las urgencias en la Liga, donde los sevillistas no ganaban desde el 2 de diciembre (2-0 al Dépor). La primera parte dio la razón a Montella, primer técnico en años en repetir alineación en el club nervionense y con sólo tres días de margen. El 0-2 al descanso era fruto de la perfecta ejecución de los jugadores del plan establecido: algo parecido al 1-4-4-2 sin balón, con Franco Vázquez ayudando en la presión adelantada, y un 1-4-3-2-1 con posesión en la que el argentino era el enlace perfecto con el ataque. El Sevilla hacía daño arriba, sin adormecer las jugadas, y frenaba casi todas las acometidas del Espanyol, que sólo inquietó a Sergio Rico en un tiro lejano de Javi Fuego y un remate a bocajarro de Gerard Moreno, quien le dio al aire tras ganarle la posición a Escudero.

Fueron dos acciones aisladas, pues los de rojo mandaban con cierta tranquilidad. De hecho, al cuarto de hora ya ganaban tras un buen pase de Sarabia a Corchia, un gran amago de Correa ya en el área y el oportunismo del Mudo, quien remachó a la red el despeje de Diego López ante el tiro de Correa. Ya tenía el Sevilla el partido donde más le interesaba, pues el Espanyol debía cambiar en busca de hacer algo más que plantarse en su campo. Las ayudas en las bandas sevillistas tapaban los huecos y hacía que llegaran pocos balones a los dos delanteros pericos, Baptistao y Gerard Moreno. Y, además, salía con mordiente en busca del segundo, como en una carrera rápida de Muriel ante Duarte: se le fue desviado por poquísimo el zurdazo al colombiano.

Pasada la media hora llegó el segundo. Un golazo de Sarabia, que cogió el balón a unos 40 metros tras otro robo por presión general, y llegó hasta casi el área chica, dejando atrás a dos rivales antes de pegarle un punterazo con su pierna menos buena, la derecha, y alojar el balón en la escuadra. Las excelentes sensaciones y el 0-2 reforzaban la fe de unos jugadores que, más allá de cambiar su actitud, van recuperando la confianza en lo que hacen, el verdadero mal que asolaba a la plantilla en las últimas semanas.

Tras el descanso, Quique Flores introdujo a Sergio García y Víctor Sánchez sin perder tiempo. Tenía a tres delanteros, en un 1-4-3-3 que podía dejar huecos a la contra al Sevilla pero que obligaba a los de Montella a mantener la misma atención defensiva, sin confianzas por la ventaja de dos goles. Pero salió algo relajado el equipo andaluz y recibió dos avisos que no acabaron en gol de milagro. Primero Banega, demasidado fallón esta vez, entregó un balón en área propia a Moreno, quien cedió para Baptistao, pero el brasileño disparó a las nubes con la única oposición de Lenglet, pues Sergio Rico estaba cerca de Moreno. Acto seguido, una mala basculación defensiva derivó en Sergio García solo en el área, pero la cruzó demasiado.

Las dos ocasiones blanquiazules espabilaron al Sevilla, que recuperó el control poco a poco. Arriba Muriel presionaba como nunca (una carrera suya en el 88’ con 0-2 demostraba la nueva fe que inunda a los jugadores), Nzonzi tranquilizaba a Banega y Mercado atrás paraba a cuanto atacante rival aparecía por su zona. La agresividad del argentino, pese a sus limitaciones con balón, lo hacen imprescindible. Quique agotó sus balas con Marc Navarro, pero el Sevilla ya no se dejó sorprender en la última media hora. Montella volvió a leer bien el encuentro y movió a Sarabia hacia el centro para dejarle la banda a Navas, que a punto estuvo de marcar en dos tiros desde el borde del área. En los últimos minutos dio algo de descanso a Correa y Banega y disfrutó el técnico italiano con otro golazo, el de Muriel, quien encontró premio a su partido con una jugada partiendo desde la banda izquierda, adentrándose en el área, driblando al central y dejando atrás al lateral, y anotando ante Diego López. Nuevo chute de moral y fútbol para el Sevilla, al que Montella parece cogerle el aire y lo lleva al partidazo del martes pleno de confianza.

FICHA TÉCNICA

Espanyol: Diego López; Javi López (Marc Navarro, min.62), Hermoso, Duarte, Dídac; Fuego (Víctor Sánchez, min.46), Darder, David López; Baptistao, Melendo (Sergio García, min.46) y Gerard Moreno.

Sevilla: Rico; Corchia, Mercado, Lenglet, Escudero; Banega (Nolito, min.86), N’Zonzi; Sarabia, Vázquez (Navas, min., Correa (Geis, min.77) y Muriel.

Goles: 0-1: Vázquez, min.14. 0-2: Sarabia, min.34. 0-3: Muriel, min.90.

Árbitro: Undiano Mallenco (Comité navarro). Amonestó al entrenador Quique Sánchez Flores (min.69) y a los jugadores Javi Fuego (min.32), Baptistao (min.41), Javi López (min.54), Mercado (min.71), Escudero (min.84), Víctor Sánchez (min.85).

Incidencias: Partido de la vigésima jornada de LaLiga Santander disputado en el RCDE Stadium ante 19.607 espectadores.