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Los jugadores del Sevilla Atlético celebran el 1-0, obra de Ivi. / Inma Flores
Iván López Álvarez, Ivi en el universo futbolístico, no es un ‘9’ nato, aunque ya asume el rol de heredero de Juan Muñoz. El exdelantero del Getafe, uno de los fichajes veraniegos de la secretaría técnica que dirige el isleño Ramón Rodríguez, Monchi, estrenó su casillero personal en el último envite ante el Real Jaén de Gonzalo Arconada. Sus dotes de atacante hábil y generoso agradaron a los ojeadores que espiaron su proyección en el filial del cuadro del Coliseum.
Ivi se unió al ex del Real Murcia Carrillo en la lista de fichajes para la zona de ataque. Un 27 de marzo de 2014, una plaga de bajas asoló a la primera plantilla de un Getafe que entonces comandaba Cosmin Contra. Los azulones perdían 0-1 ante el Villarreal merced a un gol de Perbet y el técnico rumano buscó movilidad en los últimos metros. Ivi, criado en los escalafones inferiores del modesto Collado Villalba, estrechó la mano de Sarabia e ingresó en el césped con determinación. La 2013-14 fue, sin duda, su mejor campaña. Anotó 8 goles en el filial, de Segunda División B, y fue un habitual en los entrenamientos de la primera plantilla.
Con una propuesta de renovación del Getafe en firme, Ivi decidió emigrar rumbo a la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, donde el domingo facturó el 1-0 ante el combinado de La Victoria. Ivi es un motor diésel que funciona a pleno rendimiento cuando el calendario enfila hacia los rigores del invierno, aunque en el B ya asume el papel de heredero de Juan Muñoz, el ‘9’ innegociable del curso anterior.