Al menos 48 personas han muerto al hundirse en el mar Egeo, ante la costa de Turquía, un barco en el que viajaban más de 80 inmigrantes ilegales.
Los inmigrantes -la mayoría de nacionalidad palestina, iraquí y somalí- intentaban alcanzar la isla griega de Quíos y entrar así en territorio europeo, un método muy empleado por personas de Asia Central y Oriente Medio para ingresar en Europa, dada la proximidad de las islas griegas del Egeo a la costa turca.
Las autoridades se enteraron la noche del domingo de lo sucedido cuando dos supervivientes lograron nadar hasta la costa y pidieron ayuda, tras el naufragio de la embarcación en la noche del sábado. Otros cuatro fueron salvados con vida y hospitalizados durante la noche y un séptimo fue rescatado hacia el mediodía local del lunes.
Los supervivientes aseguraron a las autoridades que en el bote, de 15 metros de longitud, iban al menos 60 personas, aunque la Guardia Costera de Turquía explicó que, según sus datos, 85 personas viajaban en la embarcación.
