Se llama vitrificación y es una innovadora técnica que permite congelar los óvulos en milésimas de segundo para, en un futuro, implantarlos en el vientre materno. 70 sevillanas ya se han sometido a este tratamiento, que practica el IVI, para alargar la edad fértil. El 98% de los óvulos logra burlar el paso del tiempo.
El éxito se debe a la rapidez con que se efectúa la congelación: milésimas de segundo. Ésta es su principal virtud y diferencia con otras técnicas similares, en las que se demora el proceso con el consiguiente riesgo de que se formen cristales que perjudican al óvulo. De ahí que, tiempo atrás, de cada 100 óvulos extraídos, sólo se lograse fecundar uno.
Según explica Manuel Fernández, director del Instituto Valenciano de Infertilidad en Sevilla, la terapia comienza administrando a la mujer dosis extras de estrógenos -hormonas femeninas- durante dos semanas para que los ovarios, en vez de un óvulo, produzcan entre seis y 20 en un solo mes. Todos ellos se vitrifican y se guardan en el banco de óvulos de la clínica. De modo que cuando la mujer elige ser madre, sólo tiene que pedir cita para que se descongelen sus óvulos, se fecunden con el semen de su pareja o un donante anónimo -el IVI también tiene en Sevilla un banco de semen internacional- y se le implantan en el útero.
"El perfil de la mujer que demanda este servicio es el de una joven que tiene que someterse a una quimioterapia o una radioterapia que puede dañar sus óvulos, padece un problema ovárico o le queda poco tiempo de fertilidad", precisa Fernández. "Así, si el desgaste de los óvulos es muy grande con el paso del tiempo, el del útero es muchísimo menor. De ahí que mujeres de 60 años se hayan quedado embarazadas con tratamientos de fertilización artificial", continúa.
No obstante, el código ético del IVI impide, en sus clínicas, implantar óvulos fecundados en mujeres con más de 50 años. Y eso que precisamente la avanzada edad con que la mujer decide ser madre sigue siendo la principal causa de infertilidad. "Sobre todo, cuando se forman nuevas parejas pasados los 40 años que desean ser padres".
El siguiente problema más común es la baja calidad del semen masculino, bien porque presente poca movilidad, bien porque no contenga ningún espermatozoide. "La mayoría de ellos no se dan cuenta de estas alteraciones hasta que no se hacen una prueba después de varios intentos de embarazo", advierte el director de la clínica sevillana.
diagnóstico gratis. Fernández también hizo balance de la actividad del IVI durante el año pasado: la clínica trajo al mundo a 660 bebés, 538 fueron concebidos por fecundación in vitro y 122 por inseminación artificial. Además, efectuaron 170 diagnósticos genéticos preimplantatorios para evitar que padres portadores de una mal fatal puedan transmitírsela a sus hijos. De igual manera, tienen solicitados al Ministerio la gestación de tres bebés para salvar a sus hermanos enfermos. El IVI también presentó ayer una campaña por la que un ginecólogo especializado atenderá la primera visita a la clínica de forma gratuita hasta el Día de la Madre. El precio de los tratamientos luego oscila entre los 800 y los 6.000 euros.
