Si se cumplen los cálculos de Abengoa, a partir de 2011 Écija producirá energía eléctrica para 210.000 personas, una población casi seis veces mayor que la astigitana. La empresa quiere construir dos plantas solares en la que es, ya de por sí, ciudad del sol.
Las dos plantas de Abengoa en Écija se llamarán Helioenergy 1 y Helioenergy 2. Serán gemelas y cada una tendrá capacidad para producir 50 Megavatios (MW) de potencia cada año. Su construcción está prevista en una finca de 478 Hectáreas adquirida el año pasado por la filial solar de la multinacional en Écija.
La inversión prevista por Abengoa Solar ronda los 500 millones de euros, según Pedro Robles, consejero delegado en España de la filial de la multinacional, que calcula que las obras de Helioenergy 1 y 2 podrían comenzar "en torno al primer semestre del año 2009" y estar terminadas dos años más tarde.
Robles destacó que ambas plantas son "solares termoeléctricas", para diferenciarlas de las platas fotovoltáicas. "La radiación solar se concentra sobre un tubo absorbedor de calor, dentro del cual circula un fluido que alcanza gran temperatura", apuntó el directivo de Abengoa para sintetizar el funcionamiento.
"Una vez calentado el líquido, se produce vapor de agua que es enviado a un turbogenerador donde se expande, con objeto de producir energía eléctrica", añadió. El fundamento tecnológico de las instalaciones solares de Écija es el de los colectores cilindo-parabólicos, una técnica que emparenta las futuras plantas de Écija con el compejo Solúcar, de Sanlúcar la Mayor, también promovido por Abengoa.
Ambas plantas están compuestas por un conjunto de espejos -"no de paneles, como en las fotovoltáicas"- de alta reflectividad y con forma parabólica. Los espejos están ubicados sobre una estructura que les permite seguir el movimiento del sol, para perder el mínimo posible de la radiación solar.
Mejoras ambientales. El complejo termosolar producirá electricidad "suficiente para el consumo anual de 70.000 hogares", calculó Pedro Robles, "minimizando la dependencia energética del extranjero, el consumo de recursos naturales y la generación de residuos". Supondrá también, por tanto, una mejora ambiental, "ya que va a evitar el vertido a la atmósfera de 180.000 toneladas de dióxido de carbono cada año", añadió el consejero delegado de Abengoa.
Además, Robles subrayó el volumen de empleo que la construcción de ambas plantas va a generar "tanto en la ciudad como en su comarca". Abengoa tiene previsto que la construcción de su complejo termosolar cree alrededor de 600 puestos de trabajo y 60 en la fase de explotación.
