Más problemas para Manolo Jiménez. Adriano Correia también sufre problemas musculares y, aunque no de la gravedad de los de Diego Capel, son lo suficientemente incómodos para dejar en el aire la participación del brasileño en la cita de Almería.
El adductor se ha convertido en un enemigo más del Sevilla. Las roturas de este músculo en Luis Fabiano y Diego Capel ha provocado que Jiménez pierda a dos de sus puntales, y puede caer un tercero, porque Adriano Correia, que en el entrenamiento del pasado miércoles sufría un pinchazo al disparar a puerta, se sometió a las pertinentes pruebas que confirmaron que padece una "una rotura de grado uno en el miosfacial del adductor mayor izquierdo", según informó el cuerpo médico del club sevillista. Su vuelta dependerá de la evolución de las dolencias, aunque lo normal es que esté de baja entre siete y diez días, continúa el parte.
En palabras de Manolo Jiménez, su lesión "afortunadamente no es grave". "Es una microrrotura y creo que podrá llegar a Almería -domingo 19, 21.00 horas Canal Plus- quizás algo justo, pero puede llegar si todo va bien", señaló el técnico, que dejó claro en todo caso que "no forzará" al brasileño porque "sería contraproducente".
Si finalmente Adriano no puede jugar en el estadio de los Juegos Mediterráneos, las puertas se abren para Lautaro Acosta, que ya jugó en la banda izquierda en el derbi y ante el Salzburgo. También podría tener alguna oportunidad De Mul e incluso el argentino del Sevilla Atlético Armenteros, que ya fue convocado en pretemporada.
Por su parte, José Ángel Crespo recibió el alta hospitalaria tras su operación en la mano y volverá al trabajo con sumo cuidado, así como Renato, que ha mejorado de la fiebre y pudo realizar el entrenamiento completo. Finalmente, Fazio realizó trabajo completo con el recuperador y la próxima semana podría volver al trabajo de grupo.
