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Arenas elude la bronca por las represaliadas

Evita censurar las duras críticas de dirigentes del PP al decreto andaluz

el 23 sep 2010 / 18:54 h.

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El líder del PP andaluz, Javier Arenas, ayer en la reunión de la dirección regional.

El líder del PP andaluz, Javier Arenas, eludió ayer censurar, en rueda de prensa, las descalificaciones de dirigentes nacionales de su partido al hecho de que la Junta vaya a indemnizar con 1.800 euros a las mujeres vejadas por el franquismo. Arenas no desautorizó ni a la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, quien acusó al Gobierno andaluz de dividir a las mujeres por ideología, ni al consejero de Presidencia madrileño, Francisco Granados, que tildó de "vomitivo" que Andalucía tase la dignidad de las represaliadas.


Arenas se limitó a contestar, a preguntas de los periodistas, que si llega a presidente tomará medidas "para unir y no para separar" a la sociedad. Reconoció que cualquier persona que haya sufrido en el pasado "merece el mayor de los respetos", pero insistió en que al PP le obsesiona "el futuro". Lejos de reprobar a los suyos, el dirigente popular optó por la técnica de que la mejor defensa es un buen ataque: aseguró que los socialistas demuestran estar cómodos en los debates del pasado porque "les aterra" reconocer sus "responsabilidades" en la crisis y el paro. A su juicio, los presidentes del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de la Junta, José Antonio Griñán, están "obsesionados con el pasado". "Y yo estoy obsesionado por el futuro", reiteró.

Según el dirigente del PP, cada día que pasa está más convencido de que con los socialistas "nunca superaremos el pasado", y prometió que logra gobernar la comunidad intentará "todos los días" apostar por la concordia, por la reconciliación, y por el espíritu de la transición y de la Constitución. "Ellos quieren división, y yo quiero concordia; ellos quieren reabrir heridas, y yo quiero cerrar las heridas sociales que tiene Andalucía en pleno siglo XXI y que son muy importantes", recalcó.


Frente a la postura del PP, el presidente andaluz, José Antonio Griñán, mostró ayer su sorpresa por el hecho de que alguien se pueda sentir ofendido con el decreto que concede ayudas a las represaliadas. Griñán dijo que está "algo sorprendido porque no es una decisión contra nadie, sino a favor de alguien, ya que sólo se habla de víctimas y nada más", por lo que no entiende "cómo nadie puede sentirse ofendido porque reparemos, en la medida de nuestras posibilidades, a mujeres que sufrieron vejaciones".


presupuestos, al juez. En otro asunto muy distinto, el PP no descarta acudir a los tribunales si no se compensa a Andalucía de la falta de ejecución del total de las inversiones previstas en los Presupuestos Generales del Estado, y cuyo déficit los populares cifran en 2.197 millones. Según Arenas, el Gobierno central ha dejado de invertir en 2008 un total de 478 millones y de 1.719 millones en 2009, y denunció que no ha cumplido con el mandato estatutario de invertir el 17,8% en función del peso de la población andaluza en el cómputo nacional.

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