Los arquitectos sienten que no pintan nada en el diseño que el Ministerio de Educación está haciendo de su carrera para adaptarla al nuevo Espacio Europeo de Educación Superior (Plan Bolonia). Y por eso, mañana, en torno a medio millar de profesionales y estudiantes de la Escuela Superior de Sevilla se manifestarán en Madrid junto a todas las escuelas y colegios de Arquitectura de España para denunciar lo que consideran una "degradación" del título.
En esencia, los arquitectos reclaman tener el mismo reconocimiento que ya lograron arrancar los ingenieros al Gobierno: que el título de Arquitectura tenga categoría de Máster (con una carga lectiva de 360 créditos) y no quede "devaluado" a un Graduado en Arquitectura. Los médicos también reclaman lo mismo y se sumarán mañana a la manifestación.
Los arquitectos no terminan de creerse las últimas declaraciones de intenciones del ministerio, que asegura que le dará a la carrera la máxima categoría, la del máster. Los universitarios se temen que estas promesas no sean más que cantos de sirenas con un único objetivo: el de desactivar las protestas anunciadas. En este marco de indefinición es en el que la Escuela Superior de Arquitectura de Sevilla afronta la redacción de un nuevo plan de estudios. El director del centro, Narciso Vázquez, convocó ayer a todos los profesores a una asamblea -en un acto histórico en el seno de la Universidad- para debatir las dos propuestas -una expuesta por el profesor José Ramón Sierra y otra, por el profesor Bioque- con las que trabaja la comisión creada para abordar el nuevo plan de estudios. Ambas coinciden en dos aspectos: la reivindicación de una carrera de 360 créditos (con categoría de máster por tanto) y la necesidad de una docencia integrada, es decir, en la que los departamentos se coordinen con el fin de ofrecer al alumno desde su entrada en la Escuela una visión global de la Arquitectura.
El director del centro tiene previsto convocar también una asamblea con los estudiantes para debatir el cambio de plan de estudio. En un mes, tendrá que haber una propuesta consensuada para enviarla al Rectorado y de ahí a la Aneca.
