Bankia y Banca Cívica afrontan esta semana su debut en bolsa en dos operaciones consideradas clave para el devenir del sistema financiero y de la economía española en general, tras unos días marcados por el fuerte castigo a los valores y al diferencial de la deuda española.
El salto al parqué se producirá pasado mañana en el caso de Bankia -nacida de la integración de siete entidades de ahorros lideradas por Caja Madrid- y el jueves para Banca Cívica, que decidió posponer un día su estreno bursátil, y llega justo después de aprobar los test de estrés realizados a la banca europea.
La entidad que preside Rodrigo Rato fijará hoy el precio definitivo de su OPV y, dos días después, el miércoles, tendrá lugar la admisión a negociación de los títulos. Bankia ha fijado en 5,05 euros el precio máximo de las acciones destinadas a inversores particulares. Este precio se sitúa en la parte más alta de la banda indicativa de precios de entre 4,41 y 5,05 euros por título, lo que supone una capitalización de entre 7.641 y 8.749 millones.
El banco ofrece al mercado 824,57 millones de acciones, ampliable con 82,45 millones de títulos adicionales si los bancos colocadores ejercen su opción de compra. Bankia dirige su oferta en un 40% a inversores profesionales (entidades, fondos de inversión y pensiones, y gestoras de carteras, entre otros) y en un 60% a particulares. La inversión mínima es de 60.000 euros para los institucionales, y de 1.000 euros en el tramo minorista.
Por su parte, Banca Cívica se estrenará en bolsa un día después que Bankia, aunque los calendarios iniciales de ambas operaciones coincidían. El grupo integrado por Cajasol, Caja Navarra, Caja Canarias y Caja Burgos fijará el precio final mañana y comenzará a cotizar el jueves. Cívica ha fijado en 3,8 euros el precio máximo del tramo minorista, situando el valor de sus títulos en el nivel más alto de la banda indicativa de precios, que para sus empleados será de 3,61 euros.
