Es el momento de los ayuntamientos. El ex presidente de la Junta, José Rodríguez de la Borbolla, asegura que toca resolver el "problema" financiero de las arcas locales y que ahora "es el momento" para que la Junta ceda competencias a las corporaciones.
José Rodríguez de la Borbolla, presidente de la Junta de Andalucía entre 1984 y 1990, asegura en un entrevista con Efe que a la arquitectura institucional española le queda por resolver el "problema" financiero de los ayuntamientos.
Este año se cumplirán los 30 años de la constitución de los primeros ayuntamientos democráticos y -en su opinión- no sólo es cuestión de recursos y de distribuir de otra forma los ingresos públicos, sino que hay que "avanzar" en la cesión de competencias de la Junta a las corporaciones locales. "Es el momento de hacerlo, pero con mayor tranquilidad institucional", ha acotado quien fuera segundo presidente desde la conquista de la autonomía andaluza. Borbolla (Sevilla, 16 de abril de 1947) es abogado de profesión y presidente del consejo editorial de El Correo. El nuevo Estatuto de autonomía contempla dos leyes autonómicas: la de régimen local y la de participación en los tributos de la Junta, para delimitar con claridad las competencias de los ayuntamientos y mejorar sus ingresos. Ambas están pendientes aunque en marcha, según la Consejería de Gobernación, que busca consenso político para su aprobación.
Ponente del primer Estatuto de Autonomía y colaborador en el actual, el político socialista se ha mostrado convencido de que el referéndum del 28 de febrero de 1980, en el que Andalucía accedió a la autonomía plena, "condicionó" el futuro institucional de España y rememora que fue una "explosión de sentimiento y de voluntad de ser de un pueblo; una operación política de muchísima envergadura".
Sobre las distintas reformas estatutarias, el ex presidente cree que ha habido una voluntad "consciente" en unos casos (en referencia a Cataluña) de "revisar" la Transición y el "peligro" de modificar el Estado autonómico, pero admite que el resultado final "cuadra" con la unidad de España y la Constitución. "Cuando (el Tribunal Constitucional) resuelva los recursos contra el Estatuto catalán y el andaluz se consolidará este cuadro", apostilló.
Del actual Estatuto, afirma que ha supuesto para la comunidad un avance en derechos, competencias y autogobierno, aunque le da especial importancia al traspaso de las aguas del Guadalquivir, un proceso que ha calificado de "reinstitucionalización" si bien advierte de que se está desarrollando en un escenario de crisis económica "impensable" y de confrontación política "muy crispada que condiciona" la situación.
Además de destacar el "calado" de la "panoplia" de medidas que está tomando el Gobierno andaluz contra la crisis, Borbolla sostiene que serían "buenas" tanto la concertación social como un acuerdo político. "En España se produjeron los acuerdos de La Moncloa y sirvieron para salir de la situación. Yo pienso que si pasa un poquito el ruido político sería bueno un acuerdo sobre medidas básicas. El Pacto de la Moncloa es irrepetible, pero sí son posible acuerdos básicos sociopolíticos", ha recalcado, aunque ha precisado que el exceso de "dramatismo" de la vida política no favorece el consenso.
Aunque confiesa estar "muy alejado" de la actualidad política diaria, el también miembro permanente del Consejo Consultivo de Andalucía se ha referido al debate financiero andaluz sobre la eventual fusión entre Unicaja y Caja Castilla La Mancha, un proceso que respalda si es para conseguir una gran caja.
"Sería igualmente bueno que esa futura entidad y el resto se centrarán en el entorno más inmediato y con criterios locales. Todo el mundo no puede actuar como si fuera el Citibank. Las cajas deben dar respuestas con una gestión más ligada al territorio", ha aseverado.
Preguntado por la desaparición del PA del Parlamento, expuso que el nacionalismo andaluz "posfranquista nunca tuvo demasiado sentido" por la realidad sociológica de Andalucía.
