La provincia de Sevilla no es precisamente una tierra de inmigrantes. Apenas suman cien mil personas en un territorio que, tal y como se refleja en el censo del INE, está a punto de sobrepasar los dos millones de habitantes. Pero la necesidad de trabajo y las campañas agrícolas que se dan en lugar como la Vega de Sevilla han provocado un hecho paradigmático: que de los 12 municipios de más de 10.000 habitantes donde más aumentó la población extranjera en la última década, seis son sevillanos.
El ránking lo lidera Cantillana, cuya población inmigrante creció un 3.000% en la última década. Y es que casi mil habitantes, de un pueblo de 10.008 personas, son foráneos. La campaña de la recogida de la naranja hace de efecto llamada, al igual que pasa con Alcalá del Río, que ocupa el cuarto puesto con un incremento del 1.840%; y La Algaba, con un 1.206%. El resto de los municipios sevillanos que están encabezando esta lista proceden del mundo rural, como Lebrija (1.247%), Pilas (1.398) u Osuna (1.426%), que también cimentan buena parte de su economía en las tareas del campo, convertido en una de las vías de búsqueda de empleo de los inmigrantes.
Sin embargo, ese aumento no significa un incremento masivo de inmigrantes en la provincia. Más bien el censo del INE enfoca como población con más porcentaje de inmigrante las situadas en Alicante, Gerona o Islas Baleares, provincias en las que uno de cada cinco habitantes son extranjeros. No en vano, hay casos como Rojales (Alicante), donde hay un 72% de inmigrantes.
No en vano, al igual que los municipios sevillanos encabezan el crecimiento de extranjeros de la última década, también registran los porcentajes mínimos de representación. Morón de la Frontera, por ejemplo, es el cuarto municipio de España superior a 10.000 habitantes con menor presencia de inmigrantes, con apenas un 1,3%, en una lista de 20 pueblos en los que el INE cita a Arahal (1,4%), Las Cabezas de San Juan (1,8%) y Osuna (1,8%). En Sevilla, quién tiene más representación es San Juan de Aznalfarache, con un 11%.
La capital se sitúa en un porcentaje de inmigrantes del 6%. El primer avance del censo refleja que la mayoría de esta comunidad, 20.576 personas, proceden de América. Le siguen 10.142 habitantes censados que nacieron en uno de los estados miembros de la UE y, con menor representación, se sitúan los procedentes de África, Asia y Oceanía por este mismo orden.
