Manolo Jiménez no podrá contar, posiblemente durante las tres próximas semanas, con Diego Capel, que ayer se rompió el adductor durante su estancia en la selección española. El alcance de la lesión se valorará hoy en Sevilla, pero parece poco probable que el de Albox pueda estar para los primeros compromisos oficiales tras el descanso liguero.
Las lesiones se acumulan en el Sevilla, y todas muy similares. Ayer Diego Capel sufrió una rotura en el abductor, en la misma zona en la que también la padece Luis Fabiano, mientras se entrenaba con la selección española en Madrid. Tras la misma, acudió a la clínica Cemtro, en la que se confirmaba que el canterano nervionense sufrió "una rotura de segundo grado en unión miotendinosa de adductor mediano". El Sevilla no especificó el tiempo que tendrá que estar de baja el futbolista, aunque la primera valoración de los médicos de la selección española apuntaba a un periodo cercano a las tres semanas. Es decir, que podría estar de baja hasta principios de noviembre. El almeriense ha vuelto a la capital hispalense para recuperarse.
Koné acorta los plazos. Más grave que el de Capel es el caso de Koné. Ayer Juan Ribas, jefe médico sevillista, revisó al futbolista en Bruselas y las sensaciones volvieron a ser positivas. "Tiene flexibilidad en la rodilla, se esfuerza al máximo y está respondiendo muy bien, y no hay nada inesperado tras la operación", indicó el galeno, que dada las buenas expectativas aseguró a este diario que "el objetivo es que Koné pueda estar jugando a finales del mes de enero o comienzos de febrero, se hablaba de seis meses de baja, pero eso será como máximo, y su respuesta nos hace confiar en que puedan ser poco más de cinco", añadió. El marfileño pasará una nueva revisión, a cargo del doctor Martens, el que le operó, en unos 10 días. A partir de ahí, alternará dos semanas de rehabilitación en Bruselas y otras dos de trabajo en Sevilla.
