El exjugador del Espanyol Javier Chica, que se ha despedido hoy del club blanquiazul en Cornellá-El Prat, ha repasado sus quince años como futbolista del equipo barcelonés y se ha mostrado molesto con la entidad por el trato que ha recibido en los últimos tiempos.
"Mi pensamiento era seguir en el Espanyol, pero después del último partido ante el Sevilla y, viendo el poco interés del club, decidí pasar revisión médica con el Betis", ha apuntado el lateral, que ha explicado que la dirección deportiva, encabezada por Ramon Planes, dio largas a su representante para tratar su futuro.El futbolista ha agradecido "el apoyo de la afición", que pidió su renovación en el campo y a través de las redes sociales.
Además, ha lamentado no poder despedirse de su afición cuando su equipo ya no se jugaba nada ante el Sevilla: "He trabajado hasta el último momento, pero hay que respetar las decisiones".Chica, con 136 partidos como blanquiazul, no ha podido elegir su mejor momento en la entidad catalana. "Es muy difícil, he vivido muchas experiencias aquí. Quizá el debut o la final de la UEFA en Glasgow. Me gustaría que me recordaran como un jugador físico que lo ha dado todo por este club", ha comentado.
El lateral ha estado arropado en el acto de despedida por su familia y por el consejero delegado Joan Collet como máxima representación del club.
El presidente Daniel Sánchez Llibre no ha podido asistir por problemas de agenda. "Apreciamos y queremos a los jugadores de nuestra cantera y es un momento triste. Le deseamos suerte", ha asegurado Collet.
