Irse con la música a otra parte. Eso han tenido que hacer los miembros de la asociación musical Álvarez Quintero, que se han visto obligados a abandonar el inmueble donde realizaban los tradicionales ensayos como consecuencia de las quejas y denuncias presentadas por una vecina de la zona.
Los integrantes de la banda venían concentrándose en un garaje situado en la calle Clemente de la Cuadra "desde que comenzaron las obras en el colegio Álvarez Quintero, ya que antes de esa fecha, y durante las últimas tres décadas, ensayábamos en las instalaciones del centro educativo", según explicó el director de la asociación, Moisés Redaño. Sin embargo, "no ha sido hasta hace varios meses cuando la única vecina que vive junto al local ha comenzado a denunciar y llamar a la Policía Local para quejarse", aseguró uno de los músicos y miembro fundador de la entidad, Felipe Piñero.
El actual local, en palabras de Redaño, es alquilado por los integrantes de Álvarez Quintero, quienes acuden a la sede "los martes y jueves, de ocho y media de la tarde a 10 de la noche, y los sábados de cinco y media a siete, por lo que tampoco estamos a horas intempestivas".
Sin embargo, y fruto de las continuas quejas vecinales y la acostumbrada visita policial, los músicos acudieron el pasado jueves a hablar con el alcalde, Francisco Jiménez (PA), para que mediara en la búsqueda de una solución. Además de este encuentro, miembros de la banda se reunieron en días posteriores con el regidor utrerano para abordar esta cuestión.
Así, Jiménez comentó que, "mientras buscan un local adecuado, momentáneamente y de forma provisional, están usando la caseta municipal pequeña, anexa a la de grandes dimensiones, como forma de colaboración por parte del Consistorio en la medida de lo posible".
Responsabilidad. En cualquier caso, y a pesar de la "labor encomiable" que realiza la asociación musical, el alcalde utrerano recordó que "la banda es una entidad privada y debe asumir la responsabilidad que le compete".
Sobre el futuro espacio donde realizar sus actividades, Jiménez recordó que "estamos trabajando en los locales de ensayo en Los Silos", aunque Moisés Redaño aseguró que "son pequeños para que quepan todos los músicos, ya que de media suelen acudir en torno a los 30 o 40 miembros, cifra que aumenta hasta los 60 en las salidas procesionales".
Otra propuesta planteada por la banda es su realojo en el colegio Álvarez Quintero, algo sobre lo que Francisco Jiménez se comprometió a mantener conversaciones con su director y mediar "en lo posible".
La asociación musical Álvarez Quintero nació en 1963, según explicó Felipe Piñero, permaneciendo activa durante dos años, y fue en 1977 cuando retomaron la actividad musical que prolongan hasta la actualidad.
