Local

Condenado a 83 años por abusar y asesinar a dos jóvenes policías

La Audiencia de Barcelona condenó a 83 años a Pedro Jiménez por el asesinato de dos agentes de Policía en prácticas en el barrio de Bellvitge de L'Hospitalet de Llobregat en octubre de 2004. Deberá indemnizar a los familiares con cantidades que suman 780.000 euros. Foto: EFE.

el 15 sep 2009 / 11:17 h.

TAGS:

La Audiencia de Barcelona condenó a 83 años de prisión a Pedro Jiménez por el asesinato de dos agentes de Policía en prácticas en el barrio de Bellvitge de L'Hospitalet de Llobregat en octubre de 2004. También deberá indemnizar a los familiares de las víctimas con cantidades que suman 780.000.

Eso sí, el procesado, de 39 años, sólo estará en la cárcel 40 años -el máximo legal- ya que, como solicitó la Fiscalía, se le aplicará la doctrina Parot y no obtendrá beneficios penitenciarios. De esta forma, se evitará que sea puesto en libertad dentro de 30 años, cuando los presos condenados por delitos graves empiezan a disfrutar de sus permisos.

Pedro Jiménez ha sido hallado culpable de dos asesinatos con alevosía y ensañamiento, una agresión sexual, una violación de domicilio, un incendio, un robo con violencia, un robo con fuerza en grado de tentativa y una profanación de cadáver, delitos por los que la Fiscalía solicitaba una pena de 102 años y 11 meses de prisión. También deberá pagar una multa de 2.160 euros e indemnizar al dueño del piso en el que vivían las jóvenes por los daños causados. La sentencia señala que la prueba indiciaria para condenarle "no es sólo suficiente, sino abrumadora", en referencia, entre otros, a los pelos y al ADN del acusado hallados en los cuerpos de las jóvenes, a las pisadas de sangre y una huella dactilar que dejó en el piso.

Durante el juicio, celebrado entre el 21 y el 24 de julio, el acusado sostuvo que las pruebas fueron manipuladas para incriminarlo y negó haber cometido el crimen, si bien reconoció haber estado en el piso de las víctimas para recoger un paquete de droga -insinuando así que ellas eran traficantes-, y haber mantenido relaciones sexuales consentidas con una de ellas.

De hecho, la defensa sostuvo que Pedro Jiménez, que mide 1,56 metros, no pudo reducir solo a las víctimas. Sin embargo, el tribunal cree que lo logró intimidándolas con la navaja y porque las agentes en prácticas intentaron aplicar lo aprendido en la academia sobre la importancia de mantener la calma en ese tipo de situaciones y esperar el momento oportuno. Las jóvenes "no contaron ni con la experiencia y sangre fría del acusado ni con sus verdaderas intenciones", según los magistrados.

  • 1