Un vecino de Sant Hilari Sacalm (Girona) que al parecer sufre trastornos mentales ha estado conviviendo durante dos o tres meses con su padre muerto y sentado en la mesa del comedor, según informaron fuentes del caso.
El domingo pasado, una de las hijas de Andreu Vilar, un vecino de Barcelona de 94 años, fue a ver qué tal estaban su padre y su hermano, que vivían juntos. La mujer descubrió entonces que su padre estaba muerto e inmediatamente se puso en contacto con los Mossos d'Esquadra, que inspeccionaron el inmueble y comprobaron que no se apreciaban signos de violencia. La comitiva judicial se presentó en el lugar y levantó el cadáver. La autopsia confirma que el anciano murió por causas naturales pasadas las fechas navideñas.