Miguel Archanco y Ángel Vizcay, en una junta de accionistas. Miguel Archanco y Ángel Vizcay, ex presidente y ex gerente de Osasuna, pasaran la noche en el calabozo de la policía de Pamplona y este viernes serán puestos a disposición judicial, tras ser detenidos este jueves al mediodía por la policía dentro de una investigación que se sigue por la desaparición de al menos 2,4 millones de euros de las arcas del club navarro y una querella por supuesto amaño de partidos presentada por la Liga de Fútbol Profesional.
El Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) informó hoy en un comunicado que la querella de la LFP se instruirá en el Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona, que también investiga el presunto desvío de al menos 2,4 millones de las cuentas del Osasuna.
La querella de la LFP se presentó el pasado 26 de febrero, y el titular del juzgado ha decidido acumularla a la causa abierta por el presunto desvío de dinero por parte de los anteriores responsables del Osasuna.
El anuncio de la querella coincidió con la detención del expresidente de Osasuna, Miguel Archanco, el exgerente Ángel Vizcay y el exdirectivo Txuma Peralta el único que luego fue puesto en libertad, a los que se investiga por los presuntos delitos de apropiación indebida, societario y falsedad documental.
Precisamente Vizcay, gerente de Osasuna durante los últimos 24 años, desveló públicamente en febrero que participó en un intento de amaño con dos jugadores del Betis, en una reunión en Madrid, una confesión hecha en enero a la LFP. Al parecer, la declaración de Vizcay ante la LFP fue grabada en vídeo y en ella admite que se ofrecieron 250.000 euros a dos béticos al final de la pasada temporada si ganaban ante el Valladolid y una semana después, en caso de ser necesario, se dejaban ganar ante Osasuna.
