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Diana Navarro, invitada especial en la gala anual de 'Temple y pureza'

el 28 feb 2012 / 21:03 h.

Jonathan Pereira pelea con Jairo, del Racing, en el duelo de ida.
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Camino de cumplir 15 años de existencia en antena, el espacio flamenco de Radiolé Temple y pureza ya ha escrito su propia página en la historia de la música bajoandaluza, y se encarga cada año de actualizarla con la celebración de sus ya tradicionales galas. La de este año -que supone ya la tercera edición- se celebrará hoy, a partir de las 22.00 horas y una vez más en la sala Joaquín Turina del Centro Cultural Cajasol.

Este año la cita estará especialmente dedicada a la savia nueva del flamenco, "que como queda patente en nuestro programa, viene con mucha fuerza", subraya la directora del programa, Tere Peña, quien oficiará a la sazón como conductora de la gala.

En el cartel destaca como figura invitada la malagueña Diana Navarro, una de las intérpretes de más sólida trayectoria de las surgidas en los últimos años, y cuya versatilidad le permite desenvolverse con la misma soltura en registros jondos, copleros e incluso pop. Según informa la emisora, su último disco lleva por título, nada azarosamente, Flamenco.

Otra de las actuaciones llamativas de la jornada será la de Lakshmi Basile, más conocida en los predios de lo jondo como La Chimi, una bailaora californiana que ha logrado hacerse un hueco en este competitivo campo a fuerza de tañento y de constancia.

Completarán el cartel las más que solventes figuras de Sandra Carrasco, Juan Peña, Manuela Cordero, Mesalla, Juan Ramírez y Laura Vital.

"Ponemos mucho cariño y mucho trabajo en esta gala", señala Tere Peña, "porque para nosostros es un momento muy especial, el de encontrarnos con nuestro público", comenta la periodista, quien de paso hace notar que el flamenco, a pesar de su auge artístico, vive momentos económicos tan difíciles como cualquier otro género.

Cabe recordar que Tere Peña, directora de Temple y pureza, lleva toda la vida dedicada al flamenco. A su labor informativa y divulgativa de este arte, hay que sumar la producción musical de más de 20 discos. Con una de estas obras, Mis 70 años con el cante de Antonio Núñez El Chocolate, consigue en 2002 la más prestigiosa distinción musical: el Grammy al Mejor álbum flamenco. Curiosamente, es la única mujer que lo posee, hasta ahora, en nuestro país.

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