El fin de semana se ha teñido de trágico color en el término municipal de Utrera. Dos personas fallecieron el pasado sábado mientras dormían, como consecuencia de la inhalación del humo procedente de la mala combustión de un brasero. El suceso se produjo en la utrerana urbanización de Las Perdigueras.
El servicio de emergencias 112 explicó que los hechos se conocieron en torno a las 21.20 horas del pasado sábado, cuando recibieron una llamada telefónica que alertaba de la presencia de una persona, posiblemente muerta, en el interior de la vivienda situada en esta parcela, ubicada en la calle Sorgo de esta urbanización.
De inmediato dieron aviso al servicio de emergencias sanitarias 061, dependiente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que se trasladó al lugar de los hechos para intentar socorrer a la víctima. Junto a sus efectivos también se desplazaron varios agentes de la Guardia Civil de Utrera.
Alertó el hijo. Una vez en el recinto, uno de los muchos chalés que existen en el término utrerano, los sanitarios certificaron el fallecimiento de un varón, natural de Sevilla, de 58 años de edad, junto al cual yacía también el cuerpo sin vida de una mujer. Según señaló el servicio de emergencias, la persona que alertó del suceso fue el hijo del fallecido, quien estuvo buscándolo hasta que logró localizarlo en su casa de la urbanización Las Perdigueras, que está situada en la zona norte de Utrera. Fuentes del Instituto Armado explicaron que todo apunta a que la muerte de estas personas se produjo a consecuencia de la inhalación de los gases procedentes de un brasero de carbón.
Y es que ambos fallecidos se encontraban acostados, durmiendo en el interior de una habitación cerrada por completo, encontrándose el domicilio lleno de humo debido a la combustión. Al parecer, las dos personas habían muerto varias horas antes de ser halladas. Con la presencia del forense y de la Policía Judicial de la Guardia Civil, finalmente se produjo al levantamiento de los cadáveres. La autopsia deberá corroborar ahora si se trató de una muerte dulce por inhalación de gas, como apuntan todos los indicios, o si hubo otros factores.
