Llega la recta final del Campeonato Nacional de Liga y esta tarde, en Almería, hay unos puntos que sirven para mucho. Los locales, que han firmado una gran temporada, piensan que todavía pueden optar a la Copa de la UEFA, mientras que el Betis sabe que con un punto tendría la tranquilidad plena para pensar únicamente ya en el futuro y olvidarse de matemáticas y del descenso. En todo caso, sigo con mi convencimiento de que los verdiblancos no tendrán ningún problema de aquí al próximo 18 de mayo.
Paco Chaparro y Unai Emery en los banquillos. Dijimos que el momento del técnico sevillano llegaría cuando menos lo esperáramos, y así ha sido. Tan cercanas están las partes que todo apunta a la continuidad. El tiempo sirve como enseñanza y ya conocemos bien a los protagonistas. En cuanto a Unai Emery, algo debe de tener su agua cuando todos la bendicen. Lleva poco tiempo en este mundo y no son Lorca y Almería plazas de repercusión mediáticas, por lo que sus méritos aún son mayores.
De todas formas, no nos precipitemos en juicios de valor, no encumbremos a nadie antes de tiempo, aunque, repito, sus números son, desde luego, para quitarse el sombrero.
