Los mercados respiraron tras conocer el aval de la justicia alemana a la participación del país germano en el primer rescate de Grecia y en el fondo de asistencia financiera para países de la Eurozona con problemas. Y respondieron recuperando parte de las cuantiosas pérdidas registradas días atrás.
Y es que el Tribunal Constitucional Federal de Alemania rechazó ayer las demandas presentadas tanto contra la participación del país germano en el rescate griego como en el fondo europeo de ayuda, aunque en su dictamen subraya el papel clave que tiene que desempeñar el Parlamento alemán en el control de futuros rescates.
Así, el Tribunal afirma que el Gobierno alemán debe contar con la aprobación del comité parlamentario de presupuestos antes de comprometerse a prestar cualquier ayuda, una circunstancia que podría ralentizar la aplicación de los acuerdos alcanzados por el Eurogrupo. De hecho, el juez subrayó que esta decisión del Constitucional "no debería malinterpretarse como un cheque en blanco para nuevos paquetes de rescate".
Los denunciantes, un grupo de cinco profesores universitarios y un diputado conservador bávaro, habían presentado tres demandas por separado ante el Constitucional germano al considerar que la participación de Alemania en el primer rescate de Grecia y en el posterior mecanismo de ayuda vulneraban el papel de control que debe ejercer el Bundestag sobre los presupuestos del país.
Apenas una hora después, la canciller alemana, Angela Merkel, realizó ante el Parlamento una vigorosa defensa del euro, del que aseguró que "no puede permitirse su caída y no caerá", aunque advirtió de que la actual crisis, caracterizada por un endeudamiento excesivo durante décadas, no puede resolverse mediante "eurobonos o reestructuraciones de deuda", sino que se tratará de "un largo y difícil camino".
Además, no dudó en calificar como el "objetivo central" de la presente legislatura conseguir que una Europa "más fuerte" emerja tras la actual crisis, tal y como sucedió con Alemania, para lo que sugirió la posibilidad de reformar el Tratado de Lisboa.
Por su parte, el Íbex 35 subió un 2,77% que le permitió recuperar los 8.100 puntos, con lo que el descalabro en lo que va de semana se mitiga al 3,6%. Jugosas ganancias en Fráncfort (4%), París (3,6%) y Londres (3,2%).
Además, el Parlamento Europeo y los Gobiernos de los 27 ultiman un acuerdo para que la UE imponga multas de hasta el 0,2% del PIB, que en el caso de España supondrían 2.000 millones de euros, a los países con déficit y desequilibrios excesivos. Previsto para junio, el principal punto de discrepancia es que la Eurocámara, que cuenta con el apoyo del BCE, exige que las multas sean casi automáticas y los Veintisiete desean conservar un mayor margen de maniobra político antes de lanzar los procesos sancionadores.
La canciller alemana se ha presentado en el Bundestag como la salvadora del Viejo Continente. "Mi misión central", ha dicho Angela Merkel, es ayudar a Europa a salir de la crisis financiera con "el mismo éxito con el que lo ha conseguido Alemania"."Somos de nuevo la locomotora de crecimiento en la UE", pero los éxitos económicos del país no pueden perdurar si en el resto de los miembros no se produce un proceso igual.
"Si los problemas de un solo país, como Grecia, pueden poner en peligro a toda la Unión monetaria y si en el Tratado de Lisboa no hay mecanismos que os permitan evitarlo, si estamos de acuerdo en que necesitamos más Europa, una Europa en la dirección correcta, una Europa con futuro, una Europa más fuerte, entonces la modificación del Tratado no debe ser un tabú, con miras a conseguir que esas políticas sean vinculantes", ha explicado Merkel.
Por otra parte el Tribunal Constitucional Federal de Alemania ha rechazado las demandas presentadas contra la participación del país germano en el primer rescate de Grecia, así como en el fondo de asistencia financiera para los países de la eurozona con problemas de deuda, aunque en su dictamen subraya el papel clave a desempeñar por el Parlamento alemán (Bundestag) en el control de futuros rescates.
Así, en su dictamen el Tribunal afirma que el Gobierno alemán debe contar con la aprobación del comité parlamentario de presupuestos antes de comprometerse a prestar cualquier ayuda, una circunstancia que podría ralentizar la aplicación de los acuerdos alcanzados por el Eurogrupo.
"El Gobierno federal requiere la aprobación del comité parlamentario de presupuestos antes de comprometer garantías", dijo el juez Andreas Vosskuhle en la lectura del veredicto.
