La línea de alta velocidad que unirá Almería y Granada permitirá reducir el tiempo de viaje a 65 minutos con respecto a los 126 actuales. La obra costará 2.200 millones de euros y se desarrollará en la orografía "más complicada de España" en la que se construye un AVE, según explicó ayer el subsecretario de Estado de Fomento , Jesús Miranda Hita. La nueva línea ferroviaria permitirá, además, unir Almería con la capital andaluza en dos horas y 20 minutos, frente a las más de cinco actuales.
Entre las características del proyecto destacó que contará con una vía doble que se asienta sobre una plataforma de 14 metros en la que discurrirá tráfico mixto de pasajeros y mercancías -este último con horario nocturno- y que estará electrificado. Fomento ha dispuesto en el estudio informativo de varias alternativas para diseñar el trazado, tres para la zona de Granada y seis para la de Almería. Así, el trazado de la provincia granadina contempla una variante por Guadix, donde se construiría una nueva estación, mientras que en el almeriense, la ruta preseleccionada sin variante por Viator es de una extensión de 61,96 kilómetros, de los cuales 11,60 kilómetros están conformados por túneles. Sólo en Almería se contempla la creación de 23 viaductos y 16 túneles, uno de los cuales llega a tener una extensión de 4,16 kilómetros.
Pese a las complicaciones del terreno, la pendiente ascendiente no superará la inclinación de 30 milésimas, de modo que la velocidad media que alcanzará el AVE desde Almería hacia Granada será de 203,09 kilómetros hora, mientras que para el trayecto contrario, disminuirá a 168,78 kilómetros por hora.
Hita declinó dar fechas para la puesta en marcha de las obras pero que la elaboración de la declaración de impacto medioambiental (DIA) podrá darse a lo largo de 2010.
