El Ayuntamiento abrió ayer la puerta a que la línea 3 del Metro pueda ir en superficie por la Palmera, pero dejó clara la contraprestación: que cualquier línea que cruce el Centro de la ciudad sea soterrada. El concejal de Urbanismo y Presidencia, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, insistió en que todo el trazado del Metro ha de ser "fundamentalmente subterráneo, sobre todo en el Casco Histórico, y el resto subterráneo donde se deba y en superficie donde se pueda".
Celis reiteró que "el modelo de Metro para las líneas 2, 3 y 4 es exactamente el mismo que para la línea 1", es decir, subterráneo siempre que sea posible, como siempre ha defendido el Ayuntamiento, que quería túneles incluso en la periferia. A la vista de los altísimos costes, en los que la Junta quiere ahorrar al máximo, el Consistorio podría transigir en algunos tramos, pero no en los que crucen la parte antigua de Sevilla. Por eso, el tramo cuya ejecución es prioritaria -el de la línea 3 que unirá El Prado con barrios de la zona norte de la ciudad como la Macarena, Pino Montano o San Jerónimo- deberá ser "mayoritariamente subterráneo" al atravesar el Casco Histórico, insistió ayer el concejal.
La Junta está aún negociando con el Ayuntamiento cómo materializar el trazado de las distintas líneas ya dibujadas del metropolitano, tres de las cuales pasan por el Casco Antiguo. Para una de las más complicadas, la parte de la línea 3 que recorre la Ronda Histórica ya hay acuerdo: será bajo tierra como insistió el Consistorio, aunque se dispare el coste. Los primeros estudios que maneja la Consejería de Obras Públicas ratifican que es posible, aunque faltan catas para confirmar que no hay problemas en ningún punto del recorrido.
La Consejería tiene intención de comenzar las obras antes de final de año, para que puedan estar en marcha de cara a las próximas elecciones, aunque primero debe redactar los proyectos en función de los acuerdos a los que llegue con el Ayuntamiento sobre qué tramos serán soterrados.
Para conseguir que en el Centro el trayecto sea siempre subterráneo, el Consistorio tendría que ceder en tramos más alejados como La Palmera, donde se negocia ahora un tramo en superficie a partir del cruce con Bueno Monreal. El Consistorio llegó a dudar de que fuera técnicamente posible, pero la Junta parece decidida y el Consistorio ha abierto la puerta a esa opción.
El centro debe esperar. Lo que de momento ha quedado fuera de las conversaciones es el Centro de la ciudad en sentido estricto, ya que la prioridad tanto del Ayuntamiento como de la Junta pasa por conectar los barrios, lo que además supone un alivio, ya que las dificultades técnicas en ese área son muy elevadas, sobre todo para abordarlo bajo tierra.
