No hay ni proyecto ni plazos, pero lo que el Ayuntamiento tiene claro es que la Fábrica de Artillería sólo podrá tener un uso cultural. Así lo explicó en declaraciones a El Correo la delegada de Cultura, Maribel Montaño, que aseguró también que el uso del edificio como sede judicial está "descartado" por Justicia pero también por el Gobierno local.
Sólo unos días después de que se hiciese público que el Instituto de Cultura de Sevilla (ICAS) ocupará parte de la fábrica hasta que esté concluida su sede definitiva en la Puerta de la Carne, abriendo las instalaciones a los sevillanos con visitas guiadas, ya han sido varias las propuestas para el futuro de este emblemático edificio, que quedará sin uso en mayo cuando sea abandonado por el Ministerio de Defensa.
El martes, y ante el retraso de la futura Ciudad de la Justicia, el presidente de la Audiencia Provincial de Sevilla, Damián Álvarez, lanzó una propuesta para crear un "triángulo de la Justicia" entre el Prado, Viapol y la antigua Fábrica de Artillería que fue rechazada tanto por la Junta como por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
El Ayuntamiento resalta también que las visitas guiadas servirán para que ciudadanos e instituciones conozcan el complejo fabril y así puedan hacer sus propuestas para este espacio, que se tendrán en cuenta al elaborar el plan director de usos.
Posible emplazamiento para el futuro Museo de la Ciudad de Sevilla, una nueva ubicación para la hemeroteca municipal o un lugar "con tirón" para la organización de eventos son algunos de los usos que las asociaciones ciudadanas comienzan a proponer para el aprovechamiento de los 20.000 metros cuadrados del edificio de la Fábrica de Artillería.
La asociación de vecinos Huerta de la Salud propone que el edificio sea sede para el Museo del Ejército y el Museo de la Ciudad, como explica su presidente, José Miguel González, que pide que la opción que se elija "aporte algo a la ciudad".
Según asegura, verían también con buenos ojos un "centro de investigación" o las oficinas centrales del Parque Aeronáutico. "Todo, menos caer en tópicos como cines de verano" o actividades lúdicas "sin contenido relevante", reivindica el presidente vecinal. El objetivo para los residentes, asegura por último, es el de "darle valor a la zona".
Quienes han visto en el recinto un "espacio singular" son los organizadores de congresos. No en vano, una de las demandas más recientes para este colectivo era la de encontrar lugares "con tirón, como edificios emblemáticos o iglesias" en el centro.
Uno de ellos es el edificio de la Fábrica de Artillería, que "está enclavado en pleno arrabal de San Bernardo", como recuerda el presidente de la Asociación Sevillana de Organizadores Profesionales de Congresos (Aseopc), Gustavo de Medina. "El Real Alcázar está ya muy triturado", alega el presidente de Aseopc, pero "habría que meterle muchísimo dinero".
De esto son conscientes también en Cultura, que afirma que será necesaria la participación de la iniciativa privada. Para el presidente de Aseopc ésta "es la única medida que funcionaría a medio plazo".
