Exposición sobre El Cachorro en el Mercantil. / J.M.Paisano
FOTOGALERÍA. Exposición El Cachorro. Eterno aliento de Sevilla
Frases y citas de personalidades muy conocidas que resumen las emociones que el Cristo de la Expiración despierta, fotografías que plasman la evolución de la cofradía en la calle con imágenes inéditas, curiosidades y mitos de la hermandad... La exposición El Cachorro. Eterno aliento de Sevilla, inaugurada este viernes en el Mercantil, promete grandes sorpresas a sus visitantes, entre ellas la posibilidad de contemplar parte del paso sobre el que procesionó el Cristo desde 1929 a 1974.
Entre las piezas más valiosas que podrá ver se encuentran la copia del contrato de ejecución del Cristo de la Expiración realizado por Francisco Antonio Ruiz Gijón en 1682 y a modo de altar dos crucificados inspirados en el Cachorro: uno de Antonio J. Dubé de Luque realizado para ocupar el oratorio personal de Bueno Monreal y que actualmente se encuentra en el oratorio del Seminario Metropolitano de Sevilla y, al otro lado el que se encuentra en Villanueva, concretamente en la Institución de las Antonianas.
Exposición sobre El Cachorro en el Mercantil. / J.M.Paisano
En el patio, marcando el recorrido hasta el siguiente salón encontramos el azulejo original de la Plaza de España que un día diseñara Aníbal González para la exposición de 1929 y, que actualmente es patrimonio del Estado. También se podrá disfrutar del primer vídeo 360º que realiza una visita virtual por la Basílica y que en poco tiempo e incluirá en la página web de la Hermandad del Cachorro y de otro audiovisual realizado por el periodista Carlos Colón que despierta un especial sentimiento.
En el salón II para terminar la visita se encuentra, entre otros, el frontal del antiguo palio de las hermanas Antúnez ,actualmente en la Vera Cruz de Utrera; el Palio actual y manto de salida de la Virgen del Patrocinio realizada por Luis Álvarez Duarte en 1973 y una parte muy impactante dedicada a la desaparecida Señorita de Triana en el desgraciado y fortuito incendio que se producía en la Capilla cuando todo estaba preparado para la preparación anual del Quinario el 26 de febrero de 1973
A cada esquina del cartel dominado por la fotografía de la antigua Virgen del Patrocinio hay dos ángeles que se encontraban en el altar, uno restaurado y otro sin restaurar atribuido a la Roldana que da debida cuenta del aparatoso incendio que se produjo y del cual el Cristo de la Expiración sufrió daños en las piernas y pies que pudieron ser reparados.
