El campo sevillano no sólo es víctima de las nevadas, el temporal, las inundaciones o la crisis, sino que además contará con casi 12.000 jornales menos tras la congelación de las partidas del Plan de Empleo Rural (PER) por parte del Gobierno central. Un informe elaborado por la Diputación de Sevilla llega a esa conclusión tras constatar que se producirá una pérdida del número de peonadas por la subida de la inflación, que es del 2,9%. Si hace un año, con 33,3 millones se podían costear un total de 417.760 jornales, con esta misma cantidad sólo se pueden asumir 405.998.
Ese informe da más argumentos al presidente de la corporación,Fernando Rodríguez Villalobos, que antes de conocer ese reparto ya había criticado duramente no sólo la escasa cuantía, sino lo que consideraba falta de sensibilidad del Estado por no aprobar unPER extraordinario ante la carestía que sufre el campo sevillano.Con esa revisión del número de peonadas, Villalobos no dudó en acusar al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de hacer la vista gorda ante la precaria situación de cientos de miles de familias en las zonas más sensibles por la crisis. También indicó que el estancamiento de las partidas del PER desde que el PP llegó alGobierno central ya ha supuesto una pérdida de poder adquisitivo de los eventuales agrarios del 5,4%, ya que a la congelación de este año sumó 2012, donde tampoco hubo un euro de más.
A esa circunstancia de la bajada de los jornales se suma un año en el que la producción no va por muy buenos derroteros.El mismo informe, partiendo de los datos del Boletín de Información Agraria de la Junta de Andalucía, deja a las claras que, salvo la aceituna de almazara, que registra un ligero incremento del 2,1%, los principales cultivos de los que se nutre el campo sevillano (olivar, críticos y frutales no cítricos) han sufrido un retroceso en sus niveles de producción. De ellos, destaca los frutales no cítricos, de los que dependen los tierras de la comarca de la Vega, con una caída del 37,8% de la producción de 267.654 toneladas a 166.462 en un año.Esa merma del campo sevillano supondrá, por sí solo, una nueva reducción del número de peonadas, según Villalobos. Un contratiempo del que tiene que ver en gran medida la inestabilidad meteorológica que ha sufrido la provincia, en la que se engloban los periodos de intensas lluvias e inundaciones e incluso nevadas que, por ejemplo, han arrasado los campos de la comarca de la Sierra Norte.
Poco o nada le importa el Ejecutivo de Rajoy el medio rural sevillano, manifestó el presidente de la corporación, que ahondó en una oferta que lleva tiempo mascullando: la de un PER extraordinario que venga a aumentar el número de peonadas y amortigüe la pérdida de trabajo del campo.
Así, blandió el ofrecimiento recibido por parte de la Junta de Andalucía para financiar una parte de este plan extraordinario, sobre todo después de las consecuencias que trajo el último temporal. Ante esa predisposición, Villalobos reclamó que el Gobierno central se implique con nuevas partidas. Si la Junta se ofrece, y desde la Diputación también, sólo falta que el Estado se involucre, recalcó.
A su vez, insistió en que, pese a ser buena decisión, no es suficiente reducir de 35 a 20 las peonadas como requisito para acceder al subsidio, porque la situación es de extrema gravedad. La solución, a su juicio, pasa por la eliminación del requisito mínimo de contar con jornales para acceder a esta renta.
