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El clon de Kate Middleton es una joven camarera

Heidi Agan gana hasta 800 euros a la hora por hacer de doble de la duquesa

el 06 abr 2013 / 21:09 h.

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Su enorme parecido con Catalina Middleton (ojos claros, larga melena castaña, esbelta figura) han convertido a Heidi Agan en el clon oficial de la duquesa de Cambridge. Dar vida a la esposa del heredero al trono británico es el día a día de esta camarera nacida en Corby, un pueblo industrial en Northamptonshire (Inglaterra), que de la noche a la mañana ha pasado de trabajar en un restaurante por seis euros la hora a cobrar 800 por hacer de doble de la la nuera de Carlos de Inglaterra. clon Esta joven de 32 años que acaba de conceder una entrevista al canal de televisión británico BBC, se toma muy en serio su papel y ha dejado claro que a medida que la barriga de Kate vaya creciendo, la suya también lo hará. “Así seré más auténtica y me pareceré más a ella”, apunta. Ella ya sabe lo que es tener descendencia: es madre soltera de dos hijos, uno de 11 años y otra de 4. Ahora se ha preocupado de comprar prótesis de distintos tamaños para simular el embarazo de Catalina. Agan es consciente de la suerte que tiene al parecerse tanto a la esposa del príncipe Guillermo de Inglaterra: “Es algo que nunca pasó por mi cabeza, pero se ha convertido en lo más maravilloso del mundo”. En poco tiempo, el clon de Catalina ha podido constatar que existe una gran diferencia entre trabajar de camarera y ejercer de doble de un miembro de la Casa Real Británica: “Además de estar mucho mejor pagado, es un trabajo muy divertido en el que cada día hago algo diferente y conozco a gente nueva”, aseguró en el programa de televisión al que fue invitada y en el que confesó que recibe muchas y variadas ofertas para ejercer de doble de la duquesa. Para hacer lo mejor posible su trabajo y convertirse en una gran profesional de la imitación, Agan aseguró que observa minuciosamente todos los detalles de la futura mamá en todas las apariciones y viajes oficiales que protagonizan los príncipes: “Analizo su estilismo, su gestos, el modo con que habla y se comporta con su marido. Pero una de las cosas en las que más me fijo es en su lenguaje no verbal, una de las señas de identidad que más caracterizan a la duquesa”, afirmó y dijo que hay algo que le diferencia de Middleton: “Guillermo no es mi tipo”.

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