El miembro del 'comando Erreka' detenido el pasado martes, Aitor Esnaola, y el huido Andoni Goikoetxea ofrecieron información al comando legal armado que asesinó en julio de 2001 al mando de la Ertzaintza Mikel Uribe, según se desprende de un auto del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska.
Esnaola y Goikoetxea recabaron datos sobre Uribe y remitieron la información obtenida a la dirección de ETA en Francia, indica el magistrado. El juez añade que el comando encargado de llevar a cabo el asesinato fue el conocido como 'Zartako', cuyos miembros ya han sido detenidos. Uribe resultó herido de muerte tras ser alcanzado por varios disparos y una ráfaga de metralleta cuando se dirigía a reunirse con sus amigos de la sociedad gastronómica 'Zazpi Bide'. Los autores materiales de asesinato le tirotearon cuando descendía de su vehículo para dirigirse a la reunión.
Además Grande-Marlaska desvela en el auto por el que envía a prisión a los miembros del 'comando Erreka' Aitor Esnaola y Lander Etxebarria, que el talde era responsable de desempeñar "un proyecto estratégico" de ETA destinado a "trasladar la fabricación, almacenaje y distribución de explosivos" a comandos de la banda "a territorio español". El magistrado indica que Esnaola y el huido Andoni Goikoetxea fueron captados por la histórica miembro de ETA Ainoa Múgica, hace 13 años, en 1998.
"El comando ya existía y estaba vinculado al aparato militar desde antes de febrero de 2001", explica el juez en su auto. El auto destaca que el plan de la organización terrorista estaba destinado a "evitar los constantes pasos de muga para realizar entregas de material a los comandos encargados de llevar a cabo los atentados terroristas". El comando disponía de siete puntos de entrega y tres de ellos estaban cargados con material en el momento en que se produjeron las detenciones.
El magistrado confirma, además, en el escrito que los miembros del comando estaban preparados para llevar a cabo la fabricación de detonadores.