Fueron varios responsables del club los que admitieron ayer la falta de previsión en que incurrió el Betis respecto a la avalancha de aficionados en las taquillas en las horas previas a la disputa del derbi chico entre el Betis B y el Sevilla Atlético el pasado domingo. La entidad ya anunció el mismo día por megafonía, tras verse obligado a abrir las puertas y permitir la entrada gratuita a los aficionados, que devolvería el importe de la entrada a los abonados del club que sí pagaron. Aún no han decidido si la medida se extenderá a todos los que compraron una entrada En los próximos días el club informará sobre cuándo y cómo se efectuará el reembolso. "No cabe otra cosa que disculparse. Debimos ser más previsores y ahora tomaremos medidas para evitar que vuelva a suceder", expresó el presidente Miguel Guillén.
El director de Comunicación de la entidad, Julio Jiménez Heras, aclaró que las entradas para los partidos del filial se pondrán a la venta a partir de ahora en las taquillas a la par que las del primer equipo, mientras el club trabaja en un sistema operativo de venta de tickets por internet que evite las aglomeraciones en las taquillas antes de los partidos.Igualmente, el club anunció que está tratando de subsanar los problemas con los tornos del Benito Villamarín, para lo cual trabajadores de la Liga están cambiando los sistemas electrónicos.