El Ayuntamiento ha establecido en varias zonas del casco histórico controles especiales de la Policía Local después de que el viernes se hiciera efectiva la derogación del Plan Centro del anterior equipo de Gobierno . Los agentes llegaron a interponer ayer hasta 60 denuncias, la mayoría por incumplimiento en las zonas de carga y descarga, y retirado varios vehículos.
Según indicaron a Europa Press fuentes municipales, un total de ocho policías motorizados se establecieron en las zonas de Reyes Católicos-Magdalena, Encarnación-Puerta Osario, Puerta de Carmona y Alameda-Trajano con el objetivo de llevar a cabo una labor informativa entre los ciudadanos, pues aunque el plan ya no está vigente sí lo están las prohibiciones que regían antes de la aplicación de éste. Así, uno de los principales puntos de la labor policial fue la de orientar a los conductores hacia los aparcamientos de las proximidades, para no colapsar las zonas de estacionamiento y lograr la "normalidad" del tránsito rodado.
Asimismo, el Ayuntamiento ya ha quitado las señales prohibitivas y se encuentra en proceso de retirar las señales informativas del plan, mientras que las señales que establezcan la situación previa a la aplicación de éste estará en unos 15 días.
Por su parte, los taxistas y un sector de vecinos del Centro coincidieron ayer en advertir del "caos" que se instaurará en esta zona de la ciudad a partir de septiembre, con el comienzo de curso escolar, si tras la derogación del Plan Centro no se plantea una alternativa. El presidente de la Unión Sevillana del Taxi, Fernando Morales, aseguró ayer que "pasar de la restricción a la libre circulación va a ocasionar un caos tremendo, garantizado cuando los colegios comiencen a tener actividad". Por ello, ya han trasladado al alcalde, Juan Ignacio Zoido, la "necesidad" de que se saque adelante en las próximas semanas un plan alternativo. Igualmente, la presidenta de la asociación de vecinos Estación de Córdoba, Dolores Dávila, consideró que "habría que haber aprovechado lo bueno del plan y reestructurar el mapa del cierre, dejando restringidas algunas zonas y liberando otras". Por último, el vicepresidente de la Federación de Comercio y Servicios del Centro, Tomás González, aseguró que "la máxima aspiración del comercio debe ser que el casco histórico no tenga restricción alguna y que a los sevillanos les baste con las infraestructuras existentes para llegar al centro".
