Un tribunal especial islandés ha condenado al exprimer ministro islandés Geir Haarde por uno de los cuatro cargos por negligencia grave que se le imputaban por su gestión en la crisis económica que sufrió el país en el año 2008.
Si bien, el tribubal evitó castigarlo sobre su responsabilidad en el colapso del sistema bancario que en 2008 colocó al país al borde de la bancarrota pues la sentencia exculpó al político de tres de los cuatro cargos de los que estaba acusado, aunque lo condenó por no haber convocado reuniones del Consejo de Ministros para analizar la grave situación financiera de la isla.
El conservador Haarde, de 61 años, fue jefe de Gobierno entre 2006 y 2009. Se arriesgaba a una pena máxima de dos años de prisión, pero finalmente no sólo evitará la cárcel, sino que tampoco deberá pagar una multa ni los gastos del juicio, que deberá asumir el Estado.
